miércoles, 25 de diciembre de 2019

FESTIVAL DART se inaugura en enero 2020


DART, el único Festival de Cine Documental sobre Arte Contemporáneo en Sudamérica, realizará su primera versión en Chile, con una programación completamente dedicada a la proyección de películas documentales que transmitan que, en la libertad y vanguardia del arte, siempre se encuentra una herramienta de lucha y resistencia.

Registros sobre Yayoi Kusama; la restauración de un filme de culto de uno de los más importantes exponentes del Pop Art, David Hockney; el relato histórico del edificio UNCTAD III hasta llegar a ser el GAM y una odisea en la que artistas occidentales se embarcan a la Corea del Norte de Kim Jong-un, destacan en una docena de filmes que llegarán a las salas chilenas  para unirse a la atractiva cartelera cultural de enero 2020.

El Festival, ha seguido activo en estas últimas semanas con un Ciclo de Arte y Política, reformulando su debut con tres funciones abiertas a público que ya pasaron por la Plaza Factoria Italia y una cuarta función, (Lemebel) a realizarse el 9 de enero en MAVI, cerrando este paréntesis creado a raíz de la contingencia que atraviesa al país.

Dart mantendrá su extensión de 6 días en Santiago y 3 jornadas en Concepción con una programación que se extenderá por 5 sedes: Cine Arte Alameda, Mavi, Matucana100, SalaK y Teatro Regional del Bio Bio.


lunes, 23 de diciembre de 2019

El rebusque: cuando la transgresión termina siendo un juego.


En el contexto literario, una antología contendría una selección de textos de un autor. Es común en poesía (antología poética) aunque también puede darse en otros géneros como fábulas, ensayos o cuentos.

 La antología puede ser de naturaleza temática, literaria o bien, personal y arbitraria y contiene piezas seleccionadas por su valor o calidad.

Esto brinda al público la posibilidad de acceder a piezas de gran valor individual, dentro de un mismo conjunto libro.

De esta manera, si se compra una antología de poesía sueca del siglo XX, por citar un caso, podrá leer los mejores poemas producidos en Suecia en dicho periodo temporal en un mismo libro (o en varios tomos, pero pertenecientes a una misma publicación).

Existe una obra muy divertida y singular que lleva por título “Antología del disparate”. Como su propio nombre indica este trabajo, realizado por Julio Reboredo Pazos y Javier Serrano Palacio, que viene a ser un compendio de los mayores errores y absurdos que los estudiantes han escrito en exámenes.

Así, por ejemplo, entre los disparates más singulares se encuentran los que dicen que la Torre Eiffel fue inventada por los egipcios, que Platón estudió en los jesuitas o que Cristo murió junto a dos personas a su lado que eran sus guardaespaldas.

Mucho más seria, es la antología de Juan Eduardo Esquivel que, junto a HB Editores, publicó en junio de 2019.

En ella participan poetas como Cecilia Almarza Nazar, Manuel Andros, Lenka Chelén, Elicura Chihuailaf, Theodoro Elssaca, Juan Eduardo Esquivel, Jaime Hales Dib, Álvaro Inostroza, Pauline Le Roy, Mario Meléndez, Vila Orrego-Zúñiga, Jorge Ragal Acevedo y Carmen Troncoso.

Si bien los temas poéticos han evolucionado, ya que siempre se adaptan al tiempo en que viven los poetas que la emplean para expresarse, siempre la poesía es un género literario que expresa la belleza o los sentimientos a través de la palabra en forma de verso o prosa.

En esta antología, los poetas expresan de manera directa sus emociones y los poemas están cargados de elementos e imágenes con un valor simbólico para el autor.

En su artículo “Escritores transgresores del idioma” publicado en el Comercio de Bogotá, Laila Abu Shihab, explica que “uno de los defectos que, con mayor facilidad deja en evidencia las pocas mañas literarias de un escritor, es la puntuación incorrecta, sobre todo, a la hora de poner las comas donde toca. Sin embargo, hay autores que, en un arranque de rebeldía, se negaron a puntuar sus textos, aunque ello supusiera asfixiar a un lector que los leyera en voz alta.

Por ejemplo, el escritor polaco Jerzy Andrzejewski (1909–1980) publicó en 1962 una novela escrita por entero con una sola frase, cuyas primeras 40.000 palabras se suceden sin ser interrumpidas por ningún signo de puntuación.

Gertrude Stein también desdeñó los signos de puntuación, a excepción del punto y aparte, al que consideraba “con vida propia”. Marcel Proust también desdeñaba los puntos y se pirraba por las comas, convirtiendo sus descripciones en interminables estructuras jalonadas de subordinadas, sin ningún punto en el que poder recuperar el aliento. 

Y se podría seguir hasta el infinito. Así, casi sin aire, casi sin respirar durante 43 páginas, James Joyce atrapa y se despide de los lectores del Ulises, esa obra publicada en 1922 que es considerada por muchos como la novela en inglés más importante de todos los tiempos.

Escribir párrafos interminables o capítulos sin signos de puntuación; alterar la construcción de una frase poniendo un verbo donde debería ir un adjetivo o un artículo; burlarse de la regla de las mayúsculas y las minúsculas; inventar palabras.

Todo esto, que a principios del siglo XX fue muy frecuente en la poesía y hoy se usa más en la prosa, es más común de lo que se cree. Ese tipo de narrador solo sabe de velocidad, juego, ritmo al punto que en muchas ocasiones quiebra la narración e incluso ahoga al lector.

Es así como los escritores reunidos en esta antología, evidencian una escritura autónoma y a través de la libertad que les da la sintaxis, muestran como fluye su conciencia y sus ideas porque para ellos es más importante el ritmo de las historias que letras estructuradas y rígidas

Y tal como explica Laila “y aunque leer una obra que transgreda las normas puede resultar desconcertante para muchos, también puede ser una experiencia interesante.

Desde el punto de vista académico, es un reto pues el lector está expuesto a tratar de descifrar lo que el autor quiere decir. Sin embargo, no todos pueden leer este tipo de obras que rompen con las formas de pensamiento, se necesitan personas preparadas y dispuestas a vivir un desafío distinto.

En todo caso, leer esos extractos de Rayuela en los que la sintaxis y la ortografía se convierten en un juego; leer a Huidobro cuando habla de la violondrina y el golonchelo  o leer Finnegan s Wake, la última novela de Joyce que fue publicada en 1939 y en la que el autor, inventa su propio idioma mezclando palabras que vienen de muchas lenguas, puede terminar siendo todo un juego.

domingo, 22 de diciembre de 2019

Brisa otoñal… y otros cuentos

De buenas a primera, contar un cuento parece fácil.  Pero, lo complicado viene después cuando hay que conseguir y mantener la atención del lector.

Antiguamente, era el viejo del pueblo quien reunía a la comunidad en torno a la palabra. Luego, el juglar, el trovador, el chamán, la abuela, han sido los encargados de transmitir de generación en generación historias, mitos y leyendas sin tener en cuenta razas, idiomas ni fronteras.

Príncipes, hadas, brujos, marineros, sirenas, mujeres listas, campesinos pícaros son héroes que han echado raíces y se han vuelto universales. Contar, ahora, significa revivir la tradición oral y promover la literatura.

Parece muy sencillo contar un cuento, pero quien lo haya experimentado, aunque sólo sea delante de un niño, se habrá dado cuenta de que siempre se falla alguna cosa: imaginación, memoria, recursos narrativos.

Por otra parte, Laura Caba Sainz, en su tesis “Contar cuentos: ¿Un arte o una técnica?”, explica que “contar cuentos es un arte que requiere experiencia, por lo que va unido de la práctica a través de una serie de técnicas. En el hecho de narrar o contar un cuento, hay tres elementos: el cuento, el narrador y el público. Un buen narrador tiene que tener una serie de cualidades y características para contar un cuento de forma que motive al público.

El arte de contar cuentos es uno de los más antiguos que se conoce y también la primera forma consciente de comunicación literaria, por lo que se puede decir, que la gran mayoría de los cuentos procede de la literatura popular de transmisión oral.

Lo más complicado de este género literario, el cuento, es fijar su evolución histórica o un punto de partida, por lo que no se puede precisar con exactitud una fecha del primer cuento. 

Lo que sí nos ha llegado, es que los pueblos orientales son los más antiguos creadores de cuentos que podemos conocer y que desde allí, se fueron extendiendo por todos los países del mundo, transmitidos de boca en boca, por lo juglares.

Algunas de las primeras referencias que nos constan sobre el cuento antes de los pueblos orientales son Egipto y Grecia.

En torno al año 2000 a.C., aparecen en Egipto las primeras referencias sobre el cuento. En Grecia cabe mencionar a Esopo, con sus famosas fabulas, Ovidio y Lucio Apuyelo, escritores romanos cuyas versiones se basan en cuentos griegos y orientales incluyendo varios elementos fantásticos y transformaciones mágicas para darle más valor.

Ahora, si lo que se quiere hacer es contarles cuentos a adultos, la situación se vuelve más complicada porque pesa la timidez, el control de la voz, el miedo al ridículo. Y se complica mucho más, si lo que se quiere hacer es escribir cuentos cortos.
 
En ese sentido, Juan Carlos Toledo logra concretar en su libro “Brisa Otoñal”, publicado por HB Editores, cuentos donde destacan los diversos temas y con personajes cercanos, concretos, hechos con pequeños trazos, que logran que el lector los conozca y reconozca en su entorno inmediato.

Una anécdota familiar, un álbum familiar, un error, la brisa otoñal cualquier tema, es una excusa para contar algo que le pasó a alguien de manera sencilla y a la vez compleja ya que, desde el inicio, el autor logra enganchar al lector aún, cuando la acción se abra al final o en el medio del relato.

Ahora, en estos relatos no sobra nada. Eso, se ve en el nudo de las tramas que está tan bien logrado, que encaminan de manera natural hacia los finales de los relatos, que a veces son imprevisibles, otros lógicos y, a veces, dejan la narración en el aire como esperando que el lector le dé, la última puntada a la trama.

Lo otro, es que el autor no explica las situaciones, sino que las muestra y al ahorrar palabras, ayuda al lector para que saque sus propias conclusiones, ayudándose con la elipsis para abreviar el relato, con acciones, descripciones y diálogos que apoyan la trama, que la agilizan impidiendo que se alargue innecesariamente.

Además, al ser cuidadoso con la redacción, evita cacofonías, adverbios y adjetivos innecesarios, por lo que se ve una escritura limpia lo que agradece el lector

Brisa Otoñal es un excelente compendio de relatos que atrapan al lector desde la primera línea hasta la última, pero, siempre dejándolo con gusto a poco y con deseos de leer más.

Guía aves de Chile


Guía aves de Chile es una invitación a detenerse y observar a nuestro alrededor las múltiples especies que habitan en el país; ya sea en la playa, el bosque, la montaña o hasta en la plaza y el jardín de su casa.

Un libro indispensable para distinguir cuarenta aves y aprender cómo reconocerlas y dónde observarlas en su estado natural. Con más de doscientas fotografías, este ejemplar multimedia le permite, además escuchar el canto de los pájaros al escanear el código QR que aparece en cada ficha.

También se entregan consejos para el avistamiento, mapas de distribución, características y detalles físicos de cada especie. Solo hay que tener paciencia, frenar la ansiedad y dejarse sorprender.

Escrito con un lenguaje sencillo, pero con rigor en los datos, esta guía es ideal tanto para niños como para adultos. Inspirada en la ficha que se publica en la sección “Vida, Ciencia y Tecnología” de El Mercurio, esta obra fue desarrollada con el apoyo de diversos investigadores miembros de la Red de Observadores de Aves de Chile, quienes aportan con información precisa y actualizada.

La Contratoma


El viernes 25 de mayo de 2018, la Casa Central de la Universidad Católica amaneció con candados, cadenas y un lienzo que declaraba “Toma Feminista”. Era la tercera vez en su historia que ocurría una cosa así (había sucedido en los años 1967 y 1986), solo que esta vez la ocupación era liderada por mujeres.

La universidad llevaba dos semanas con distintas facultades paralizadas por presiones del movimiento feminista, el cual se había gestado sin el liderazgo de la Federación de Estudiantes (FEUC). El grupo exigía orientar a la UC por el camino de la educación no sexista y pedía el fin de los abusos y acoso sexual que se habían denunciado en el último tiempo.

Ese viernes, cerca de las 6 de la mañana, cerca de 300 estudiantes del denominado “Movimiento Autónomo Feminista Interseccional” se tomaron el sector norte de la Casa Central, el campus principal de la UC.

Lo que no sabían, es que otro grupo de alumnos varios de ellos representantes de organismos estudiantiles de derecha, harían lo mismo, indignados con lo que consideraban una acción violenta y que no reflejaba el pensar de la mayoría, buscando presionar por el fin de la toma y evitar su expansión.

La Contratoma, es la historia de Javiera Rodríguez, una de las estudiantes que lideró la oposición a la acción del grupo feminista, publicada por Ediciones El Líbero.

Con valentía, pero sin quererlo, tomó el rol menos popular: el de oponerse a lo políticamente correcto.

Cuando la toma sólo llevaba unas horas, se enfrentó verbalmente con las feministas, momento que fue captado y transmitido por las cámaras de televisión y le valió el hostigamiento y la crítica de quienes apoyaban la toma.

Sin embargo, fue también lo que aleonó a su sector y lo impulsó a ingresar también al campus universitario y rechazar, un acto que consideraban violento.

El relato, escrito en primera persona, da cuenta del surgimiento del movimiento feminista en Chile, en concordancia con lo que estaba ocurriendo en el resto del mundo, y su expansión en las universidades.

Al mismo tiempo, permite comprender cómo los movimientos políticos de izquierda más radicales, hicieron propias las demandas de este grupo haciendo parecer a todos quienes no apoyaban sus decisiones, como contrarios a los derechos de las mujeres. 

Por último, muestra las dificultades que debe enfrentar la protagonista para entrar y hacer valer su visión más liberal en un sector político conservador.

Este libro, es una invitación a explorar el resurgimiento del feminismo y a prepararnos para las luchas que se darán en los próximos años.

MIM invita a niños y niñas a vivir un verano científico



Cerca de 600 niños y niñas de las comunas de La Granja, La Pintana y San Ramón invitará el Museo Interactivo Mirador (MIM) durante enero y febrero, por medio del programa “MIM Verano Vecino”, a vivir una experiencia especialmente pensada para ellos de forma gratuita y vinculada con la ciencia, con foco en el cambio climático.

Serán 20 los niños, de entre 8 y 12 años, junto a adultos que los acompañarán, los que recibirá el MIM cada día y donde podrán recorrer distintas salas junto a facilitadores del museo, con el objetivo de mostrarles que la ciencia puede ser muy entretenida y averiguar qué dice la ciencia sobre la contingente temática del cambio climático.

Se explicará este fenómeno a través de un experimento, mostrando por qué ocurre y cómo se pueden reducir las emisiones que lo provocan, se mostrarán las energías renovables más importantes, haciendo énfasis en su aplicación en Chile y se presentará, el reciclaje como una buena solución a la crisis climática, introduciendo los conceptos de reducir, reusar y reciclar.

Este año el MIM, que es parte de la Red de Fundaciones de la Presidencia, está invitando a las tres comunas cercanas al museo que tienen mayor índice de vulnerabilidad, para darles la oportunidad a estas familias de explorar, sorprenderse y preguntarse por el mundo que nos rodea.

“Este año quisimos potenciar este programa porque hoy más que nunca el MIM cumple un rol social muy relevante, en este caso con nuestros vecinos. 

Además de traspasar conocimientos, instar a reflexionar, a hacerse preguntas sobre el entorno y motivarlos con la ciencia, seguimos construyendo comunidad entregando momentos de unión, de esparcimiento y de alegría para estas familias que muchas veces no tienen la posibilidad de vivir experiencias de este tipo”, comenta Dalia Haymann, directora ejecutiva del MIM.

Además de acercar la ciencia a los niños y niñas de comunas con alta vulnerabilidad social, el objetivo es promover el desarrollo de ciertas competencias como el trabajo en equipo o valores como la solidaridad y el respeto, que convierten a esta actividad en una instancia que aporta a su formación integral.

La instancia recreativa y educativa se extiende durante las mañanas de enero y febrero, de martes a viernes e incluye colación y almuerzo.

Para ser parte de esta actividad las y los interesados deben escribir al correo reservas@mim.cl o llamar al 28288012 o 28288090.


viernes, 20 de diciembre de 2019

En San Joaquín celebran la Navidad Latinoamericana.


El Coro de niños y niñas del Centro Cultural San Joaquín, dirigido por el Profesor Luis Riquelme, se presentará junto al reconocido grupo femenino de música latinoamericana Newen, en el marco de cierre de sus actividades para el año 2019 en el Teatro Municipal de san Joaquín (Coñimo 286, San Joaquín, Región Metropolitana).

El taller de Coro infanti,l se inició este año y ha obtenido extraordinarios avances y diversas presentaciones durante este año, como la celebración del día del Niño y la Niña en el Parque la Castrina, en el Teatro Municipal de San Joaquín y variadas actividades comunitarias.

En un trabajo coral sobre villancicos latinoamericanos tradicionales del folklore, se presentarán junto a Newen para entregar un espectáculo familiar navideño, con un sentido de encuentro, amor y comprensión, a través de las distintas expresiones de los pueblos andinos.

El retiro de invitaciones en Centro Cultural San Joaquín, ubicado en Coñimo 286, en horario de lunes a viernes de 10:00 a 13.30 hrs. y de 15:30 a 18:30 hrs y también se puede reservar la invitación en el correo: invitaciones.teatro@gmail.com, la que podrán retirar el mismo día de la presentación en la boletería del Teatro.


Entrada liberada


Se inicia la presentación de las fotografías del concurso Ojo de Pez 2019


Desde el 20 de diciembre al 15 de enero de 2020 se podrán ver en el Museo de la Exploración R. A. Phillipi en Valdivia, imágenes tomadas desde drone, primeros planos de aves antárticas, paisajes acuáticos deslumbrantes del norte y sur del país, saltos de cetáceos muy difíciles de capturar, impresionantes imágenes de flora y fauna submarina y además, fotografías de denuncia de diferentes impactos humanos en ecosistemas acuáticos.

Lo anterior, a través de la exposición de las fotografías de los finalistas del concurso de fotografía nacional “Ojo de Pez 2019”.

En la convocatoria de este año, participaron más de 500 imágenes de fotógrafos aficionados y profesionales. De éste gran número de imágenes, cada año se seleccionan las 30 mejores que forman la exposición “Ojo de Pez”, la cual, en seis años de presentaciones, ha sido vista por más de 200 mil personas.

El fin de la itinerantica de la exposición y del concurso fotográfico, es exponer la belleza escénica de los sistemas acuáticos de Chile y destacar, su importancia para la subsistencia humana transmitiendo a la población, la vulnerabilidad de estos sistemas y la importancia que cuidarlos para poder mantener su alto valor ecosistémico.

José Garcés, parte del equipo organizador e investigador de la Universidad Austral de Chile (UACh) y Centro IDEAL, comentó que la contingencia nacional ha permitido la reflexión como sociedad y en cuanto a la forma en que la ciencia se conecta con la comunidad en general.

“Ojo de Pez, fue precisamente pensado en esa conexión, por un lado, la participación de fotógrafos aficionados y profesionales y por otro, mostrar ese mundo acuático que a veces es tan distante para muchos, a través de las diferentes exposiciones fotográficas y medios digitales. Esperamos que este Concurso sea un valioso aporte a la sociedad creando conciencia en la protección de nuestros entornos acuáticos”, agregó Garcés.

En vista de la de las movilizaciones sociales del país, la organización decidió aplazar las votaciones a través de redes sociales, para tener al ganador del público con el fin, de no desviar la atención pública del acontecer nacional.

Por tanto, las votaciones se realizarán entre el 20 de diciembre y 1 de enero de 2020 y los resultados del concurso “Ojo de Pez” 2019 se conocerán a principios de enero 2020, en el sitio www.ojopez.cl como también en las páginas y redes sociales de los organizadores.

El concurso es organizado por el Instituto de Ciencias Marinas y Limnológicas (ICML) de la Universidad Austral de Chile (UACh), el PAR Explora de CONICYT Los Ríos, Centro Investigación Dinámica de Ecosistemas Marinos de Altas Latitudes (IDEAL) e Instituto Antártico Chileno (INACH) con la colaboración del Museo de Exploración R. A. Philippi de la UACh. El concurso cuenta con el auspicio de Delfín SubTUSA Chile, la Escuela de Biología Marina de la UACh, la Vicerrectoría de Investigación, Desarrollo y Creación Artística de la UACh y Ciencia en Chile.

Actores retratan las zonas de sacrificio.

Testimonios, cantos, música y danza conforman la obra “Semillas en el desierto”, examen de egreso dirigido por la profesora Paula González, considerado como documental escénico–performativo que sitúa en la escena un proceso de investigación-creación en torno a zonas de sacrificio instaladas en las localidades de Petorca, Caimanes, Valle Hermoso, Quintero, Punchuncaví, Paine, Antofagasta, Mejillones, Los Choros, El llano, Talhuén, Chincolco, Lourdes y Cauracautín, entre otras. 

La académica y directora de la obra, Paula González, explica que el “montaje puede ser catalogado como un documental performativo, donde los alumnos desarrollaron un proceso de investigación en torno a diversas zonas de sacrificio a lo largo del territorio chileno, cruzado por cada una de sus biografías”.

“Los y las estudiantes llegaron con propuestas sobre la crisis medioambiental y principalmente sobre la escasez del agua. Durante el proceso fuimos rescatando testimonios y nos dimos cuenta, cómo en estos lugares los animales están muriendo en la carretera producto de la sequía, así como también el daño que las mineras han provocado en distintos lugares”, agrega González.

Sobre el examen de egreso, la directora añade que “nos hemos preocupado de invitar a nuestras funciones a las comunidades de los cerros, a las personas que están organizadas, para que vean nuestro trabajo, porque también estamos contribuyendo desde el arte a esta reflexión de un Chile distinto”

La Dirección, Puesta en Escena y Dramaturgia es Paula González Seguel y la asistencia  de dirección está a cargo de Paulina Castillo Cáceres

Elenco está formado por Elizabeth Beltrán Riquelme, Javiera Cantillana Matus, Víctor Fadda Muñoz, Valeria Fernández Tricallotis, Evánika Figueroa Tejada, María José Gaete Tapia, Camila González Gamin, Karen Klaassen Vásquez, Javiera Lira Díaz, Ivannia Malebrán Guerra, Karla Mora Toledo, María Belén P. Torres y Mauricio Villacura Ruz.

La dramaturgia es de María José Gaete Tapia, Ivannia Malebrán Guerra, Mauricio Villacura Ruz y Colectiva “Grillo” y la asistencia es de Felipe Carmona Urrutia. Po otra parte, el diseño Escénico y Vestuario es de Natalia Morales Tapia. El diseño Iluminación es responsabilidad de Tamara Figueroa AS; la realización audiovisual es de Ricardo Villarroel.

La historiadora es Silvana Bustos Rubio.; la asesoría del Diseño Sonoro es de Evelyn González Seguel; la autoría de las letras de las canciones es de Ivannia Malebrán Guerra y “Colectiva Grillo”.

El charanguista es César Astorga Ormazábal. La producción es de Christopher Ortega Silva y la asistencia de producción es responsabilidad de Paulina Castillo Cáceres y Camila González Gamín. La realización Escenográfica es de Miguel Alvayay; la confección del vestuario es de Lian Gallano Vásquez y los operadores técnicos son Paulina Castillo, Pablo Gutiérrez y Ricardo Villarroel. 

Las funciones serán el 19 - 20 - 21 de diciembre 19:00 hrs en la Sala Negra Escuela de Teatro Uv (Av. Brasil 1647, Valparaíso).  Adhesión voluntaria. Se sugiere traer un bidón de agua para entregar en zonas de sequía.

Proyecto de ojos bordados llega al Museo de la Memoria


Un lienzo con 875 ojos bordados y casi siete metros de largo fue el resultado de Borda sus Ojos, iniciativa que nació en Concepción y reunió trabajos de todo Chile, dando vida a esta gran obra textil en homenaje a las víctimas de lesión y mutilación ocular que fue donada hoy al Museo de la Memoria, lugar donde permanecerá exhibida durante los próximos meses.

A la fecha, el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) ha notificado más de 350 víctimas de lesión y mutilación ocular en el contexto de las actuales manifestaciones sociales, situación que ha movilizado a miles de personas a exigir justicia frente a los hechos.

A raíz de esto, la bordadora Lilian Urzúa y la ilustradora María Ignacia Jerez dieron vida a Borda sus Ojos, iniciativa que consistió en la creación colectiva de un gran lienzo conformado por retazos de tela de 15x15 cm con ojos bordados. En poco tiempo se reunieron trabajos de diversas partes del territorio nacional, incluyendo algunos que llegaron desde Brasil, Argentina y Estados Unidos.

“Lanzamos el afiche para la convocatoria el 14 de noviembre y al día siguiente ya teníamos embajadoras en todo Chile. Dos semanas después teníamos esta gran tela con más de 800 ojos bordados a mano”, comenta Jerez, quien nunca se esperó el alcance que podría llegar a tener el proyecto.

Para Lilian Urzúa, “una de las mayores motivaciones fue visibilizar nuestro rechazo y nuestro dolor a lo ocurrido con las lesiones y pérdida oculares. Fue un espacio para canalizar la pena y la rabia que sentíamos”.

Y eso quedó plasmado en la diversidad de bordados que llegaron, los cuales fueron realizados en una multiplicidad de técnicas y mensajes. “El tema eran los ojos, pero desde un principio dejamos que la interpretación fuese libre. Sólo pedimos que se ajustara a las medidas”.

Una vez finalizado, el lienzo de 3,70 x 6,75 metros fue parte de dos marchas organizadas en Concepción, para luego recorrer algunos lugares de Santiago, como la denominada Plaza de la Dignidad, y así llegar finalmente al Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, donde fue donado y permanecerá exhibido por los próximos meses.

Como una forma de conmemorar el inicio de las movilizaciones sociales el 18 de octubre, el Museo de la Memoria realizará intervenciones artísticas de este tipo todos los días 18 de cada mes, a fin de relevar el derecho a la protesta social y visibilizar las violaciones a los derechos humanos cometidas durante el actual periodo de manifestaciones.

Inauguran Biblioverano 2025 con más de 400 actividades culturales en todo Chile

  En la Casa de la Cultura de Pedro Aguirre Cerda, y ante la presencia de niñas, niños, vecinas y vecinos de la comuna, se llevó a cabo del ...