lunes, 25 de marzo de 2013

Se inaugura exposición póstuma de Angélica Pérez


 La exposición póstuma “TE MIO” de la artista Angélica Pérez, se inaugurará en la Sala de Arte del Museo Nacional de Bellas Artes del Mall Plaza Vespucio  dentro del Proyecto Museo sin Muros el próximo 5 de abril y que permanecerá abierta a público hasta el 12 de mayo de 2013.


La obra de Angélica Pérez reivindica el origen y la materialidad del té, alimento que le sirve para demostrar las entrecruzadas relaciones que existen entre corporalidad, naturaleza y mente, aspectos que la artista trabajó de manera profunda durante quince años.

De manera simultánea se inaugura una exposición suya en la ciudad de Concepción en la sala Sala de Arte Mall Plaza Trébol, abierta entre el 6 de abril al 12 de mayo de 2013.

Ambas muestras dan cuenta de una obra inédita, completamente desconocida, recuperada de sus archivos personales después de su lamentable desaparición en el Archipiélago Juan Fernández durante el maremoto del 27 de febrero del año 2010.

A través de su relación con el té, Angélica vivió el arte de una manera esencial, una forma de relacionarse con los otros y consigo misma,  liberando zonas reprimidas en una cultura de sumisión especialmente de los femenino: situaciones de dolor y pérdida que implica llevar el arte a una zona extrema,  donde es posible la propia sanación  y la de los otros.

Historiadora de profesión, Angélica Pérez se da cuenta de la importancia del té en el hogar de las familias chilenas durante un estudio de campo realizado en una población de Santiago, observando que es un elemento de encuentro, de reunión y conversación  cotidiana y para muchos de sobrevivencia, siendo junto al pan el único alimento reponedor de la jornada. 

También descubre que el té es un ingrediente activo de sanación, de la misma forma como el arte lo comienza a ser para ella. Este encuentro la obliga a realizar una investigación extensa sobre el origen del té y viaja a Japón,  gracias a una beca otorgada por la Japan Foundation para conocer la sociedad y cultura japonesa,  estadía que aprovecha para alternar con empresas familiares que se dedican a la producción y comercialización del té.

Luego de ese viaje,  inicia una búsqueda intensiva a través del arte  y el alimento, conciliando aspectos aparentemente antagónicos como la comida, la ceremonia del té, la curación del cuerpo y la sanación de la mente, sin ser el propósito último su obra puede ser vista también como una vía de acceso espiritual o mística.

Patricio M. Zarate, curador de la muestra y Administrador del proyecto Museo sin Muros expresa que “Angélica encuentra en el té una posibilidad de sanación tanto para ella, para los otros en lo social, y especialmente para el artista que en el proceso de creación sufre el desgaste emocional implicado en la plasmación de su propia obra”,

En Concepción la exposición se refiere al cuerpo y la sanación donde una serie de fotografías muestran el registro de la performance donde Angélica se aplica té matcha a su cuerpo desnudo siendo acompañdas por siete cortes de piezas de vestuario para elaborar una túnica impregnada en té negro, formas circulares y cabellos relacionadas con la curación de enfermedades terminales y una serie de dibujos con grafito de su etapa inicial que señalan un vía y una búsqueda esencial.

En Santiago,  el énfasis está puesto en el lenguaje estético, sobre todo el estudio sobre la materialidad del té y su aplicación a distintas superficies y objetos.

Angélica buscó todas las posibilidades que le ofrecía esta infusión, desde el uso solemne en la ceremonia del té, ya sea como alimento o brebaje reponedor y como tinte en aplicación directa sobre papel, a modo de la caligrafía y acuarela japonesa.  No sólo la hoja y su extracto pictográfico son parte de su modalidad de trabajo, sino las bolsas de papel, los hilos, y todo lo relacionado con la materialización del té. Hay costuras, remaches, tatamis hechos con las bolsas en infusión, con esa distintiva y particular calidad colorística de la tintura y la textura del té después de su natural proceso de oxidación.

Con estas dos muestras se recuerda la particular obra de Angélica Pérez, desaparecida en el 27 de febrero del año 2010.

“El encuentro con el té, además de su implicancia social y pública, se detiene en el propio artista, revelando aspectos de su personalidad… pocos creadores están dispuestos a correr el riesgo de exhibir públicamente el resultado de esa búsqueda tan íntima”, dice Patricio M. Zarate.

Angélica Pérez Germain nació en Bakersfield, California EEUU el 9 de agosto 1972   
Obtuvo una Licenciatura en Historia y otra en Estética en la Pontificia Universidad Católica de Chile. Cursó un Magister en Bellas Artes (DEA) en la Universidad de Barcelona (2000–2001). Realizó Tesis Doctoral por la Universidad de Barcelona, (2002-2007).

Entre sus principales exposiciones individuales cabe destacar Paisaje de la Virtud, Centre Cívic Convent de Sant Agustí, Barcelona, España (1999-2000); Tepuro, Centro de Extensión U.C, Santiago, Chile (2001); Hitonocha, Kyoto Art Center, Kyoto, Japón (2002);  Acción Ceremonia con Té (20 de abril de 2005); Performance Suriashi, Hall Pinacoteca, Universidad de Concepción, Chile, 27 marzo (2008); Performance Teati, Casa Poli, Coliumo, Concepción, Chile (2008); Nihonchiri. El Té en Ruta, presentada en Japón (2002), Galería ChileArte, Coquimbo, Chile (2009-2010).

Entre las exposiciones colectivas más importantes figuran Mirada en Viaje, Centre D’Art Santa Mónica, Barcelona, España (2001); Arte Viva, Senigallia, Italia (2001). Acción Curación de la mirada (2001); ARCO, espacio de la Universidad de Barcelona. Madrid, España (2002); Centro de Arte Cecilia Palma. Santiago, Chile (2004); Chilean Art Crossing Borders, artistas chilenos por Europa del Este y Asia (2005 -2007).

Angélica Pérez fue investigadora en la exposición y edición del catálogo del pintor chileno Agustín Abarca, realizada en el MNBA (1996-1997). Entre los años 2005 y hasta febrero de 2010 fue curadora y asistente de dirección del MNBA, período en el que tuvo una labor destacada en diversas iniciativas como la gestión de sus exposiciones itinerantes y la gestación del proyecto de televisión on-line Arte sin Muros y del Archivo Audiovisual del MNBA, que hoy lleva su nombre. Fue curadora y artista participante de la exposición Menú de Hoy. Comida Lenta: Arte y Alimento en Chile en las salas del MNBA en los Mall Plaza Vespucio, Mall Plaza Norte de Santiago y el Trébol de Concepción (2007); y co-curadora de la exposición Exijo un Explicación. 200 años de narración gráfica en Chile, (2008-2009) y curadora de la sección La mirada en reposo. Objeto cotidiano de la muestra Centenario del MNBA (2009).

Falleció en la Isla Robinson Crusoe, la noche del 27 febrero de 2010.

jueves, 21 de marzo de 2013

Dibujos y pinturas del surrealismo en las Colecciones del MNBA



Entre el 26 de marzo y el 23 de junio de 2013 se exhibirá en la Sala Chile del Museo Nacional de Bellas Artes, la exposición “Papeles Surrealistas. Dibujos y pinturas del surrealismo en las Colecciones del MNBA” que muestra, por primera vez, una selección de trabajos de renombrados artistas del surrealismo nacional e internacional, pertenecientes a la colección del Museo.

Papeles Surrealistas esta compuesta por una selección de obras de renombrados artistas del surrealismo como  Jean Arp, André Breton, René Magritte, Toyen, Leonora Carrington, y los chilenos Haroldo Donoso y Jorge Cáceres además de Matta.
 
Los dibujos y grabados de esta colección pertenecieron originalmente al poeta chileno Braulio Arenas, fundador del grupo literario surrealista Mandrágora y fueron adquiridas por el museo en 1979 siendo restauradas especialmente para esta muestra por el Centro Nacional de Conservación y Restauración de la DIBAM.


La exposición comprende una colección de 40 obras de pequeño formato -además de 5 óleos- de autores como Tanguy, Lam, Brauner, Matta y Hérold, entre otros, todos seguidores de las vanguardias de las primeras décadas del siglo XX.

Según el relato de Soledad Novoa, curadora del MNBA y de esta muestra en particular, “en una carta fechada el año 1978, Arenas se refiere a estas obras como un grupo de dibujos y grabados sobre papel cuyo mayor valor es de tipo sentimental y personal, los que habrían sido regalados por sus autores y autoras tras una exhibición organizada por el Grupo Mandrágora en la Galería Dédalo el año 1948”.

Sin embargo, a pesar de lo señalado por Arenas en aquella ocasión, “hoy es posible afirmar que este conjunto posee un valor estético, documental e histórico que nos permite enunciar algunas hipótesis sobre el desarrollo del surrealismo en Chile, así como la estrecha vinculación que mantuvieron los artistas de Mandrágora con el surrealismo internacional”, añade Novoa.

La muestra se ha organizado bajo la idea matriz de que en nuestro país no se desarrolló un movimiento pictórico surrealista, sino que éste fue más bien de carácter literario con vinculaciones hacia la visualidad en un sentido más amplio.

Una excepción a esto tal vez sea la obra de Haroldo Donoso, artista que tuvo un importantísimo reconocimiento internacional.

Para Soledad Novoa “como Museo, nos interesa discutir estas ideas y estas hipótesis, y es por ello que estamos organizando una mesa redonda para el mes de mayo en la que esperamos contar con invitadas/os que nos ayuden a avanzar en nuestras investigaciones y debatir nuestras propuestas. En este sentido, siempre hemos afirmado que no existe una historia sino más bien distintas escrituras de ella”.

Por su parte, el título de la muestra busca establecer una relación con la difusión internacional del Surrealismo desde Francia, evocando la primera gran exposición realizada en Nueva York en octubre de 1942, titulada First Papers of Surrealism (Primeros papeles del surrealismo), que contó con la presencia de la mayoría de los autores que ya habían logrado un importante reconocimiento artístico a nivel mundial, y que habían llegado a esa ciudad como parte del éxodo que impuso la Segunda Guerra Mundial.

Con relación a Chile, el movimiento surrealista tuvo un desarrollo muy importante en el campo de la literatura de la mano del Grupo Mandrágora, integrado por Braulio Arenas, Enrique Gómez Correa, Teófilo Cid y Jorge Cáceres, quienes hacen su aparición pública como grupo en julio de 1938 cuando leen sus poemas y escritos, en la Casa Central de la Universidad de Chile en Santiago.

Paralelamente a la investigación curatorial, el MNBA adquirió a principios de año dos dibujos de Jorge Cáceres, tres collages de Braulio Arenas y material documental relacionado al Grupo Mandrágora, el que será exhibido en esta ocasión junto a valiosas piezas aportados por la Biblioteca Nacional y el archivo personal de Arenas,  entre ellas  el original mecanografiado y corregido a mano del artículo escrito por Gabriela Mistral en Brasil, con motivo de una exposición de Haroldo Donoso, a quien la poeta llama “el imaginista”.

Papeles Surrealistas continúa una línea de acción que desarrolla exposiciones temporales de la Colección del MNBA con el fin de ampliar el número de obras en sala y complementar la muestra permanente de pintura y escultura chilena.

 Para la curadora del Museo, esto da cuenta de “una política que busca avanzar en el conocimiento de las obras que componen nuestro patrimonio cultural a través de investigación especializada, y diversificar los modos de difundir nuestras colecciones a partir de la exhibición y puesta en valor de obras o conjuntos de obras desconocidos para el público”.


martes, 12 de marzo de 2013

La verdad amordazada: puras contradicciones



El año pasado, Editorial Catalonia publicó el libro “La verdad Amordazada”. Autobiografía no autorizada., del australiano Julian Assange, quien desde el martes 19 de junio de 2012, se encuentra refugiado  en la embajada de la República del Ecuador en Londres, Inglaterra solicitando asilo político.

Con la lectura de “La verdad amordazada, el lector va descubriendo una vida bastante difícil que fue marcada por el abandono de un niño por parte de su padre biológico, criado por una mamá que no impuso reglas ni límites y más tarde,  junto al nuevo marido de su madre (artista teatral intinerante), durante nueve años recorrió ron Australia de lado a lado, obligando a Julian a estar en más de  30 colegios durante su juventud lo que no le dio ni una estabilidad a su vidas.

Luego, al separarse del segundo marido, “el rubio teñido y buenmozo los hizo vivir a salto de mata, entre separación y separación, y que los tuvo dominados gracias a las técnicas que manejaba la secta a la que pertenecía”.

De una infancia disfuncional pasó a ser una especie de Robin Hood cibernético que se convirtió en un adulto acusado de dos violaciones; perseguido por varios gobiernos por introducirse en sus archivos dando a conocer información clasificada como pasó en cuando 2010 burló la seguridad informática de los Estados Unidos y filtró más de 250 mil documentos secretos del Departamento de Estado y finalmente, asilado en una embajada de un país sudamericano.

Assange aparece como una figura contradictoria. Por un lado se le alaba su capacidad de introducirse en archivos secretos y develar información  entregándola a gotas y rápido.
En muchos casos, fue información que no era necesariamente relevante y muchos menos investigada o chequeada con la fuente a la cual se le ha añadido material adicional y por otra parte, se le acusa de no respetar límites, de robar información privada y de no responder a lo que se espera de un verdadero periodista.

Fernando Savater, escribe en un artículo referido a lo que hace Assange que “en esa vasta colección de materiales filtrados no hay prácticamente revelaciones importantes, que las informaciones y opiniones confidenciales que han salido a la luz eran ya sabidas o presumibles por cualquier observador de la actualidad política más o menos informado, y que lo que prevalece en ellas es sobre todo una chismografía destinada a saciar esa frivolidad  que,  bajo  el respetable membrete  de transparencia,  es  en  verdad  el   entronizado ‘derecho de todos a saber  todo: que no hay secretos y reservas que puedan contrariar la curiosidad de alguien (…) caiga quien caiga y perdamos en el camino lo que perdamos’.

Sin embargo, debido al cerco comunicacional, a los intereses ligados al poder, a los procedimientos fraudulentos; al miedo a ser descubiertos nunca podremos conocer verdaderamente las verdaderas causas de la situación de Assange.

Por cierto tratar de comprender las contradicciones que sugen , también  hay tomar en cuenta tres aspectos importantes de la vida de Assange.

El primero, no hay que olvidar que él es un hacker, un experto en redes e informática, capaz de infiltrarse y vulnerar los sistemas secretos y encriptados de organizaciones  públicas y privadas y de gobiernos.

Dos, él espera llevar a cabo, de manera extrema, uno de los objetivos de ser periodista como es contribuir a la libertad de expresión sin medir las consecuencias.

Y tercero, fue el fundador de Wikileaks desde donde, haciendo caso omiso de posiciones políticas o religiosas rompió atávicos secretos de quienes podrían perder toda veracidad al ser puestos en evidencia.

Sin embargo,  aquí se dio un doble juego. Por un lado, quienes aceptaron, transmitieron y lucraron con la información emitida desde Wikileaks, más tarde  argumentaron que no él cumplía con la ética periodística negándole reconocimiento dentro de la profesión. Entonces, tal como apuntara el catedrático de la Comunicación y profesor de Opinión Pública en la URJC, Víctor Sampedro se minimiza su alcance y se escamotean los debates de fondo”.

Por otro lado, pareciera que a Assange no le molesta mucho que se identifique a Wikileaks con él. Según opina el antropólogo de la sociedad digital Alberto Corsín e investigador en el CSIC “él mismo ha entrado en el juego del espectáculo, como ocurre ahora con su salto a la televisión ya que si se parte desde el punto de vista antropológico de la red, la gestión de la imagen de Assange podría ser una estrategia consciente y muy meditada, porque  es un error de base personalizar en su figura las redes de distribución dado que su esencia de fondo no responde a estos principios ya que caada vez que caemos en la trampa de asociarlas a un nombre y apellido,  le hacemos un favor al propio movimiento en red porque contribuye a desestigmatizarlo”.

En un mundo en que todos tenemos límites (biográficos, educacionales, de gustos y de carácter; geográficos) el estilo de Assange revienta las fronteras en las cuales actúa el ciberactivismo, trasformándose en un fenómeno comunicacional convirtiendo a Julian Assange en un héroe para algunos y en un villano para otros.

Quinchamalí abre temporada de arte en el GAM



La muestra Quinchamalí en el Imaginario Nacional  abrió la temporada de arte popular chileno de este año, en la cual son exihibidas 262 piezas de cerámica del pueblo alfarero. Además, la exposición se complementa con el lanzamiento de un libro y la proyección de un documental.

Esta exposición, que está abierta desde el 22 de enero pasado hasta el 23 de junio próximo y que  puede visitarse en la sala MAPA del Centro Cultural Gabriela Mistral, esta enmarcada en un proyecto FONDART adjudicado en 2012.

Para realizar esta muestra, el Museo de Arte Popular Americano realizó diversos viajes a terreno para conocer a las artesanas de Quinchamalí y su modo de elaborar cada pieza, todavía a la usanza antigua.

Esta exposición relata entre otras cosas el desarrollo de este arte a través del tiempo y  la relación que ha tenido la producción del pueblo alfarero con el campo cultural chileno. 

Resultado de este trabajo es la selección de 262 artículos de cerámica agrupados por utilitario y decorativo –algunos hechos en los años 40 y otros en la actualidad–, con  la idea es establecer diálogos conceptuales y formales entre las antiguas y nuevas creaciones.

La muestra Quinchamalí en el Imaginario Nacional incluye además la publicación de un libro y la exhibición de un documental en el que el equipo del museo ha registrado todo el proceso. En él se detalla la restauración de piezas patrimoniales y su correspondiente archivo fotográfico, graficando así toda la tradición productiva de esta emblemática localidad.
 
Quinchamalí es un pequeño poblado, distante 35 Km. al sur - oeste de la ciudad de Chillán, en el centro sur de Chile.

En este lugar, las familias han heredado por generaciones el tradicional arte de la alfarería en greda negra, siendo una tradición, de cientos de años. Sus raíces las encontramos en el antiguo pueblo mapuche "Quinchamalí" el que significa en lengua nativa "niñas apareadas". Destaca la cerámica en greda negra, realizadas a mano, con la ayuda de rústicos elementos, que le han dado fama a nivel internacional, mundial y universal.

 La exhibición puede visitarse de martes a viernes de 10 a 20 horas; los  sábados y domingos de 11 a 20 horas. La entrada es liberada.

Semana Santa llega al Teatro Universidad de Chile

El tradicional concierto de Semana Santa que cada año ofrece la Orquesta Sinfónica Nacional junto al Coro Sinfónico Universidad de Chile, ll...