40 años, desde este 2 de julio hasta
el próximo 25 de septiembre. En ella se exhibirán 69 obras realizadas por 45
artistas que participaron de las 12 versiones en que se desarrolló el certamen.
“El Festival Franco-Chileno de Vídeo Arte
fue, en plena dictadura, un motor de creación y experimentación que reunió a
artistas y productores en torno a un lenguaje que logró desarrollarse y
cautivar público. Esta muestra, sin duda, es un estímulo para acoger las nuevas
formas de arte y de patrimonio para seguir avanzando en espacios de expresión,
libertad y reflexión”, señaló la ministra de las Culturas, las Artes y el
Patrimonio, Julieta Brodsky.
Un espacio de contracultura y resistencia que
congregó todas las expresiones del audiovisual chileno durante los ‘80s y
principios de los ‘90s. Así se define el Festival Franco Chileno de Videoarte,
fundado en 1980/ 1981.
Promovido por la Embajada de Francia
en Chile, se transformó en una fuente de resguardo artístico y político para
los creadores y artistas que experimentaron en dictadura con este nuevo formato
y registraron con una mirada crítica los conflictos políticos y sociales de la
época.
Para Soledad Novoa, directora del Centro Nacional de Arte Contemporáneo, “esta exposición es un encuentro con un fragmento de la historia reciente en Chile desde el audiovisual.
Este
Festival se generó en un contexto donde los institutos binacionales cobraron
una relevancia particular como espacio de apoyo a la creación y a la difusión,
tanto para artistas locales como para el contacto con la creación
internacional.
La exposición Festival Franco
Chileno de Videoarte. 40 años apuesta por fomentar el diálogo entre sus
visitantes, mediante una muestra heterogénea donde comparten obras como The
Motherland, donde el artista Juan Downey retrata a la sociedad oprimida por
Augusto Pinochet como una Madre Patria que devora los símbolos de su cultura
y La voz de los 80, el videoclip hecho por el realizador Yerko Yankovic
para Los Prisioneros.
“Una de las funciones principales de un
espacio como el Centro Nacional de Arte Contemporáneo, además de dar cabida a
diversas manifestaciones de arte contemporáneo de todo el país, es impulsar y
dar visibilidad a los distintos trabajos de investigación que actualmente se
están llevando.
Esto con el fin de rescatar a artistas y
obras que por diversos motivos han quedado escondidos del relato
historiográfico. Sin duda, esta exposición representa el rescate de un hito
significativo para el arte contemporáneo de ambos países, como lo es el
Festival”, comenta el curador de la muestra, Sebastián Vidal.
Los videos que conforman la muestra,
al ser realizados con una tecnología analógica de registro y edición, proponen
un lenguaje particular y una experiencia diferente a la visualidad digital a la
que se está acostumbrado hoy en día.
Varias piezas fueron rescatadas
especialmente para la exposición y otras fueron sometidas a un proceso de
restauración. La programación contempla el trabajo de artistas contemporáneos
que desarrollaron videoarte, como también piezas inéditas de importantes
autores y otros de baja circulación.
El Festival Franco Chileno de
Videoarte. 40 años también contempla actividades complementarias como
conversatorios, recorridos especializados y mediados, además de laboratorios
artísticos para niños y jóvenes.
El Festival nació como parte de la
política cultural del Estado Frances y fue promovido por el Servicio Cultural
de la Embajada de Francia en Chile, como un espacio de intercambio y
colaboración entre artistas de ambos países.
Tuvo como fundador y director a Pascal-Emmanuel Gallet, jefe de la oficina de animación cultural de la dirección general de relaciones culturales y científicas del Ministerio de asuntos extranjeros de Francia. Se desarrolló en su versión exclusivamente chilena hasta 1992 y en su versión franco latinoamericana hasta 1996.