jueves, 6 de octubre de 2022

Antropólogo mapuche presentó libro sobre ocupación ancestral del territorio entre Temuco y Labranza

  Con bases científicas que se sustentan en hallazgos arqueológicos, títulos de merced e historias de antiguas familias, el antropólogo mapuche Danko Mariman, da cuenta de más de mil años de antepasados presentes en el Lof Mapu Botrolhue. 

Apellidos como Marivil, Cayunao, Lienan, Huaiquinao y Painemal, entre muchos otros, así como la toponimia de sectores denominados Lladquihue, Quelihue, Tromen, Trañi Trañi, Molluco y Botrolhue, pasan casi inadvertidos en la vida cotidiana de quienes habitan la ciudad de Temuco y sus alrededores. 

Sin embargo, el antropólogo mapuche Danko Mariman, perteneciente a la comunidad We Folil Mariman de Trañi Trañi, ha dedicado varios años de su vida a la investigación de sus antepasados, lo que le llevó a publicar recientemente el libro “Lofmapu Botxolwe, Memoria e Historia de los Primeros Habitantes de Temuko”. 

En este  libro plasma antecedentes científicos tales como el hallazgo arqueológico, en la parte alta de Labranza, de un “eltun” (cementerio) que ha sido datado con mil años de antigüedad (sitio Villa JMC-1), cuyos objetos (cántaros, pipas, collares) demuestran la continuidad cultural del pueblo mapuche desde esa época hasta la actualidad. 

“En este sector se han realizado hallazgos consecutivos, principalmente por parte de empresas inmobiliarias que están construyendo en la zona, pero que generalmente no son informados para no sufrir la paralización de sus obras”, indica el antropólogo, “pero también hay obras que se han detenido por encontrarse sobre sitios sagrados o dentro de títulos de merced”. 

El investigador destaca que en esta zona se ha producido un especial fenómeno de mestizaje que proviene desde tiempos precolombinos. “Los apellidos y toponimia dan a entender que aquí existieron alianzas comerciales y familiares entre mapuche y aymara, tehuelche, diaguita e incluso kawésqar, hasta llegar al mestizaje con españoles y colonos. Esta condición de mestizaje no hace perder la condición de mapuche a las personas, son mapuche con orígenes mestizos”, afirma. 

Sin embargo, lamenta la pérdida paulatina de la lengua mapuzugun con el pasar de los años y del feyentun (religiosidad mapuche), debido a fuertes procesos de colonización y evangelización, que hoy se estarían revirtiendo gracias a iniciativas como la publicación de su libro. “Los jóvenes de mi generación hemos vuelto con más fuerza para reivindicar nuestra identidad como mapuche.

El proceso que sufrieron nuestros abuelos es denominado post colonialismo desde la mirada académica, pero en el fondo fue una profundización de los antiguos prejuicios hacia la población indígena”, señala Mariman. 

Sobre el acelerado crecimiento del radio urbano de Temuco hacia sectores en que se encuentran las comunidades del Lofmapu Botxolwe, cuyos antecedentes también se encuentran en su libro, Danko Mariman señala: “A mí una vez me dijeron que para hacer tortillas hay que quebrar kuram (huevos), por lo mismo se necesita autoridades políticas capaces de tomar decisiones importantes, ¿de qué otra manera se puede resolver el problema que hoy significa el crecimiento urbano no planificado en comunas como Temuco?” 

En su investigación Mariman plantea que más de 90 mil personas no mapuche viven en terrenos que forman parte de 27 títulos de merced afectados por el crecimiento del radio urbano en Temuco, además de 40 loteos irregulares en comunidades, tomas de terrenos, extracción de áridos, forestales, micro vertederos, iglesias y otras tantas desafectaciones a las comunidades en que fueron reducidas las familias mapuche tras la Pacificación de la Araucanía. 

Danko Mariman y Jeannette Paillán 
Seremi de las Culturas, las Artes
y el Patrimonio de La Araucanía. 
El antropólogo señala en su libro que la coexistencia pacífica entre mapuche y no mapuche es posible, pero en mejores condiciones. “Los mapuche también tenemos derecho a proyectarnos hacia el futuro desde nuestra identidad y conservando nuestros territorios, aguas, menoko (humedales), flora y fauna (itxofill mogen), situación que no debe ser vista como una amenaza, sino como un sello de la planificación territorial en comunas y regiones como la nuestra”, explica. 

Consultado sobre la realización de otras publicaciones sobre territorios mapuche, Mariman destacó que estamos invadidos de historias de otros pueblos y países. 

“A mi juicio esto se da porque la chilenidad nace dándole la espalda a los mapuche y al conocimiento local y me pregunto, ¿hasta cuándo será así? 

En este sentido, el libro que acaba de lanzar viene a llenar algunos vacíos en cuanto a la ocupación de los espacios que hoy conocemos como Labranza y la propia ciudad de Temuco, de cómo eran las cosas antes de la llegada de los colonos, que pensaban los primeros sujetos que habitaron la cuenca de Estero Botrolhue. 

La versión digital del libro puede ser solicitada al autor en el correo marimandanko@gmail.com.

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