A mediados del año 2022 volvió a vivir al
país de las franjas y estrellas, lo cual la tiene más conectada con su lado
chileno que nunca. Su impulso por mantener la chilenidad de su hija mientras
viviera en el extranjero dio vida a “Nanai”, un cuento centrado en comunicar y
explicar este chilenismo.
“Cuando me vine a vivir a Chile a mis 13
años, al principio me resistí porque me sentía completamente gringa, pero
rápidamente me encanté con la cultura chilena. Cuando nació mi hija, hace un
poco más de un año, sabía que pronto nos iríamos a vivir a EEUU con mi marido y
ahí comencé a pensar en cómo transmitirle la cultura chilena viviendo en el
extranjero”, cuenta.
Para ella era clave que su hija
mantuviera, en parte, el idioma y los modismos chilenos. “Parte de ser chileno
es la cultura del sarcasmo, los chistes, los dichos. Los modismos y las
palabras chilenas son una forma de sentirse parte del país. Los que vivimos
afuera extrañamos ese tipo de cosas”, afirma.
También pensó que un libro con modismos chilenos sería un buen contrapeso a los dibujos animados que ven los niños en Chile.
“Los monitos están en español latinoamericano, no dicen, por ejemplo, ‘la guagua’. Se me ocurrió que a través de los cuentos se pueden transmitir estas palabras a los niños”, señala.Eligió la palabra 'nanai’ porque a su hija
le fascinaba tocar los dibujos de los libros. “Cada vez que le leía un libro
terminaba diciéndole “nanai” porque ella le hacía nanai a las ilustraciones.”
Además, la palabra simboliza muchas
situaciones. “Tiene varios significados, entonces me daba material para hacer
un libro. También incorporé otros modismos como ‘tata’, o que a los perros se
les dice ‘guau guau’”, explica.
Sobre la importancia de esta palabra, la autora enfatiza que es una forma de transmitir el amor. “El nanai es más que nada el cariño, ya sea para sanar las heridas, ayudar a dormir y muchas otras cosas más.
Los niños son querendones por naturaleza, y el nanai es una
herramienta para ayudarlos a demostrar lo que sienten a los que más quieren”,
sentencia.La autora
Las ilustraciones de “Nanai” estuvieron a
cargo de la arquitecto Trinidad Bordachar Álamos, quien fue la encargada de
darle texturas y vida a las historias de Bárbara. “Las ilustraciones tienen
como fin que los niños exploren y son una invitación a hacerle ‘nanai’ al
libro”, explica.
Sobre su futuro como escritora, comenta
que ya está pensando en nuevos libros infantiles, los que estarán enfocados en
lo que significa ser chileno.
Puedes encontrar “Nanai” en Trayecto.cl, Trayectobookstore.cl, Buscalibre, Antártica, Feria Chilena del Libro, y las mejores librerías del país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario