Altes Land es un área de tierras
pantanosas recuperadas a caballo entre baja Sajonia y Hamburgo. La región, está
situada aguas abajo de Hamburgo, en la orilla suroeste del río
Elba. Altes Land es una de las marismas del Elba.
La región, es productora de frutas y se
extiende sobre 143 km 2 (55 millas cuadradas). El 76.8% de los
árboles son manzanas y el 12.7% son cerezas.
El nombre oficial de la
región es Altes Land, que significa "país viejo".
Es en esta región geográfica, donde la
periodista alemana Dörte Hansen (Husum, 1964) desarrolla la trama de su novela
“La vieja tierra” cuya protagonista, es una antigua casa ubicada en esta región
del norte de Alemania, cerca de Hamburgo, llamada la Vieja Tierra.
De manera alternada, se relata la vida de
dos mujeres, Vera y Anne, que cada una, a su manera es una refugiada que debe
enfrentar los retos que les presenta la vida. Y así como Vera tiene que
enfrentarse a su historia, Anne tiene que aprender a confiar en los demás.
Hace más de sesenta años que Vera Eckhoff
vive en una casa, en una zona que está llena de manzanos y cerezos, llamada la
Vieja Tierra, que se extiende a orillas del río Elba. Llegó allí de niña,
refugiada junto a su madre, huyendo de la Guerra.
Y a pesar de que se quedó a vivir allí
trabajando como dentista, siempre se ha sentido forastera en el pueblo. La
dueña de la casa, Ida Eckhoff, las acogió a ella y a su madre, pero las dos
mujeres chocaron de inmediato.
Un día sin previo aviso, otros
dos «refugiados» se presentan ante la puerta de su casa. Estos son Anne,
sobrina de Vera, y su hijo pequeño, León. Ella, ha decidido abandonar el barrio
residencial de Hamburgo, huyendo de una sociedad ambiciosa y de un marido, que
se ha enamorado de otra mujer. Al llegar a la casa de Vera, se ofrece para a
supervisar las reformas en la vieja casa de su tía a cambio de techo y comida.
Con un argumento sencillo, el lector va
adentrándose, paulatinamente, en la vida cotidiana de los habitantes de esta
región en los cuales se reflejan los dramas y tragedias de los seres que
tuvieron que vivir con las heridas de la Guerra.
A pesar de que la novela habla de raíces,
tierra, hogar los personajes no tienen ningún sentimiento de pertenencia real a
algún sitio.
Todas las mujeres de esta novela, viven un
exilio interior ya que viven aisladas y marginadas de la sociedad que las
rodea. En ellas, los sentimientos principales son dolor, fracaso, pena.
Alrededor de estas mujeres, gira una serie
de personajes que nos muestran el entorno rural y las costumbres de la zona en
la que viven las protagonistas.
Otro punto importante, es el relato
irónico de los citadinos que ven en la vida rural, un paraíso, pero que no son
capaces de insertarse realmente en esa vida y de los que añoran ir a
conciertos, museos, etc.
Además de este contraste, la novela,
muestra una crítica a la moda de lo ecológico que, en muchos casos, resulta ser
solo un negocio rentable para quienes lo ofrecen.
En su exilio, cada una de ellas no logran
comunicarse adecuadamente para dar a conocer su historia personal, las
experiencias vividas.
Dos personajes, dos mujeres, dos
generaciones diferentes que lo único que tienen en común, es que ambas tuvieron
que huir y que deben luchar contra las dificultades propias de la época que
viven.
No hay comentarios:
Publicar un comentario