“The
big red one”, es considerada una de las películas más importantes del cine
moderno, y que fue duramente recortada, por retratar fríamente los horrores de
la Segunda Guerra Mundial.
Samuel
Fuller es posiblemente uno de los cineastas más idolatrados por las nuevas
generaciones: Quentin Tarantino, Martin Scorsese, Wim Wenders o Jim Jarmusch
han declarado su admiración por un autor “maldito”, marcado por un cine de bajo
presupuesto que explora en torno a las condiciones de la violencia moderna
dadas por su propia biografía determinada por su experiencia en el frente de
batalla durante la Segunda Guerra Mundial.
Durante
la Guerra, Samuel Fuller fue combatiente en Infantería lo que marcaría fuertemente
su cine. Conocida en español como “Uno rojo: división de Choque”, de carácter
biográfico y considerada su obra maestra, narrará muchos de los acontecimientos
que vivió, de manera descarnada y sangrienta.
Su
película más aclamada sería precisamente aquella en la que hablaría con
frialdad en primera persona, “The big red one” o “Rojo de primera línea”, es un
audaz retrato cinematográfico de la guerra que, sin entrar en mensajes
pacifistas, establece la inquietud sobre los traumas sicológicos de los
soldados que van a la guerra, sujetos comunes que se ven enfrentados a las
peores facetas de la condición humana: niños cargando carretillas con sus
padres muertos o masacres a internados de salud mental, son el marco de un
mundo infernal que su director trató de representar a partir de sus propias
vivencias.
Estrenada
en 1980, se exhibió en el Festival de Cine de Cannes despertando la admiración
de la crítica especializada, algo insólito para un cineasta considerado de
“Clase B” en los estudios de Hollywood.
La
película fue nominada a la Palma de Oro, aun cuando fue censurada y recortada.
Remontada, restaurada y remasterizada, la nueva versión incorpora más de 40
minutos inéditos que contribuyen a acercarla a lo que pretendió su director.
La
película, cuya duración original era de 4 horas y media, sería fuertemente
recortada por los exhibidores y recién en el año 2004, que, gracias a la
iniciativa del historiador y crítico Richard Schickel, se reconstruirá la obra
más cercana a la versión original propuesta por el autor, restaurando los materiales
originales y recuperando secuencias que fueron mutiladas en su estreno.
Esta
exhibición tendrá la participación como invitado del profesor José Miguel
Ortega, académico del Instituto de Estética de la Pontificia Universidad
Católica de Chile y del Instituto de Altos Estudios Audiovisuales de la
Universidad de O’Higgins, experto en la obra del cineasta Samuel Fuller.
La
exhibición íntegra de esta película se enmarca en las actividades de mediación,
intervención territorial y vinculación con el medio desarrollada por la
Universidad Academia de Humanismo Cristiano en el Barrio Brasil.
El
Cine Club Bestiario es una sala de cine barrial enfocada en la proyección de
cine arte y de autor, acompañadas de un Cine Foro al final de cada función. Es
una actividad de mediación, intervención territorial y vinculación con el medio
desarrollada en el Barrio Brasil con el objetivo de establecer un diálogo
horizontal con el público.
La
actividad se realizará el día lunes 29 de julio a las 18 horas en la Sala Juan
Radrigán, Almirante Barroso 352, Santiago, metro Santa Ana. Entrada liberada
por orden de llegada, cupos limitados.
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