miércoles, 5 de septiembre de 2012

Se publican memorias políticas de José Musalem

El libro “Mi vida entre líneas. Memorias” de José Musalem será presentado mañana, jueves 6 de sept., a las 19.30 horas, en el Centro de Eventos Casa Piedra.
De la mano de Editorial Catalonia, Musalem se muestra como un testigo y protagonista de muchos de los acontecimientos que marcaron la vida política, económica y social del sigo XX en Chile.
 José Musalem Saffie es hijo de inmigrantes palestinos, nació en Santiago de Chile, el 30 de agosto de 1924. Hijo de Plácido Musalem Dueri y María Inés Saffie Dueri, su ambiente familiar estuvo marcado por una marcada formación católica que despertó en él la sensibilidad por temas sociales que lo motivarían a estudiar leyes y posteriormente a ingresar a la arena política.
Abogado, empresario, notario público y político chileno que ha militado en el Partido Nacional Conservador, la Falange y el Partido Demócrata Cristiano.
Senador por la 4ª Agrupación Provincial "Santiago", entre 1965 y 1973. Diputado por la 7ª Agrupación Departamental entre 1953 y 1965, por tres periodos consecutivos.
Sus estudios primarios y secundarios los realizó en la Academia de Humanidades, en el Instituto Andrés Bello y en el Liceo de Aplicación en Santiago. 
Al finalizar la etapa escolar ingresó a la Universidad de Chile donde se tituló de abogado en 1950 con la presentación de la memoria “Los problemas de la alimentación mundial y la Conferencia de Host Spring”, jurando como abogado ante la Suprema Corte de Justicia el 4 de mayo de 1951. En 1969 se casó con Clemencia Sarquis Yazigi
Desde joven, participó en el servicio  público, marcado por un fuerte interés social. Fue  atraído por la figura de Eduardo Cruz-Coke, el representante más destacado del social-cristianismo conservador  iniciando  sus actividades políticas,  al ingresar al Partido Conservador  en el que permaneció cinco años hasta que lo dejo en  1951.  
Al año siguiente,  fundó el Partido Nacional Cristiano donde ejerció una labor política en apoyo a Carlos Ibáñez del Campo durante la campaña presidencial de 1952, permaneciendo en su gobierno y en la Presidencia de dicho partido hasta fines de 1953.
Luego ingresó a la Falange Nacional y posteriormente, cuando dicho partido se fusiona con una fracción del Partido Conservador, se incorporó al Partido Demócrata Cristiano, del que fue vicepresidente durante dos períodos y miembro de su comité parlamentario entre 1968 y 1969.
Políticamente, fue uno de los duros opositores al gobierno de la Unidad Popular.
Al referirse al pasado reciente de Chile, Musalem expresa que “el paso del tiempo lamentablemente ha distorsionado parte de nuestra historia y, hoy, cuando mis nietos y las nuevas generaciones se preguntan qué fue lo que en verdad sucedió, quiero hacer un aporte para que se conozca de primera fuente lo que muchos como yo, vivimos y sentimos en esos momentos tan duros”.

lunes, 3 de septiembre de 2012

Las respuestas del mudo: radiografía a Julio Ramón Ribeyro

Julio Ramón Ribeyro Zúñiga (Lima, 31 de agosto de 1929- 4 de diciembre de 1994) fue un escritor peruano, considerado uno de los mejores cuentistas de la literatura latinoamericana.

Es una figura destacada de la Generación del 50 del Perú, a la que también pertenecen Mario Vargas Llosa, Enrique Congrais Martin y Carlos Eduardo Zavaleta. Su obra ha sido traducida al inglés, francés, alemán, italiano, holandés y polaco. Aunque el mayor volumen de su obra lo constituye su cuentística, también destacó en géneros como novela, ensayo, teatro, diario y aforismo. Unos días antes de su muerte ganó el Premio de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo.

La Generación del 50, buscó una renovación en la narrativa peruana, y que tuvo como tema preferente la descripción de los cambios producidos en la sociedad limeña, que comenzaba a sufrir por esos años un acelerado proceso de modernización.

Considerado uno de los mejores cuentistas hispanoamericanos, entre los volúmenes de cuentos que publicó destacan Los gallinazos sin pluma (1955), Cuentos de circunstancias (1958), Las botellas y los hombres (1964), Tres historias sublevantes (1964), La juventud en la otra ribera (1973) y Sólo para fumadores (1987), que fueron reunidos en las recopilaciones La palabra del mudo (1973-92) y Cuentos completos (1994).

El espacio acotado por el autor es el de una burguesía limeña empobrecida, aunque incursiona a veces en ambientes marginales, manteniendo el esquema básico de la expectativa frustrada de los personajes, burócratas, seres grises y olvidados, sin voz, víctimas de la trama cruel de la expansión urbana y de una incipiente modernización.

Los personajes de sus historias, pertenecen a la clase media establecida o ascendente, que se encuentran en situaciones de quiebre o fracaso, ante las pequeñas tragedias personales o cotidianas que se articulan con los discursos en constante pugna: el racismo, los rezagos de una Lima colonial anquilosada, la migración campo-ciudad en un intento por dar a conocer el fin del orden aristocrático en manos de una burguesía pragmática y vulgar. Lo anterior, si bien estas narraciones sencillas e irónicas ocurren en Lima, son un reflejo de lo que ocurría en la América Latina de su tiempo.

Las fuentes literarias de Ribeyro se encuentran en los cauces del realismo del siglo XIX, y especialmente en la escritura de Guy de Maupassant y nunca se esforzó por ocultar una abierta preferencia por la concepción tradicional de la estructura y el lenguaje narrativos.

Dueño de un estilo austero, calificado como tradicional por su afinidad con los modelos clásicos, evitó las técnicas experimentales de la novela moderna. Sin embargo, pese a este aparente conservadurismo formal, sus cuentos fueron una contribución decisiva para consolidar el paso de la narrativa indigenista a la narrativa urbana en el Perú.

Jorge Coaguila de la mano de Lolita Editores, nos presentó hace poco tiempo, Las respuestas del mudo una recopilación de las pocas entrevistas que Ribeyro dio a la prensa.

El especial carácter de Julio Ramón Ribeyro tal como los personajes de sus escritos, lo aleja del protagonismo; acostumbrado a una existencia algo marginal que en cierto modo privilegia. Es por eso que toma la decisión de separarse de los círculos literarios limeños y sacudirse de lo que más detesta: la popularidad, la fama. "Me molesta la fama en parte porque no me permite pasar desapercibido, me saca del anonimato en el cual me gusta vivir", decía el escritor peruano.

Pocas fueron las entrevistas que dio el escritor en su vida, pues él pensaba que a los lectores más les importaba lo que el autor pensara de sus obras que los libros ya que “una buena obra no tiene explicación, una mala no tiene excusas y una mediocre carece de todo interés. En consecuencia sobran los comentarios”. Ósea, las obras se explican más por si mismas que por las opiniones del autor. A lo mejor pensaba igual que Nabokov, cuando este decía que “sentir la pura satisfacción que trasmite una obra de arte inspirada y precisa, y esa satisfacción a su vez va a dar lugar a un sentimiento de auténtico consuelo mental, el consuelo que uno siente cuando toma conciencia, pese a todos sus errores y meteduras de pata, de que la textura interior de la vida es también materia de inspiración y precisión”.

Ahora bien, toda esa reticencia que tenía para habar con la prensa se evaporaba frente a la escritura con la que construyó, un mundo de poderosa coherencia interna, dominado por un profundo escepticismo y un fatalismo derivados de la observación de la realidad. Por otra parte, sus personajes, al final de cada historia, se encuentran siempre enfrentados a la frustración. Como en la novela Alienación, donde se narra la vida de un zambo que quería ser un rubio en Filadelfia y de una rubia limeña que terminó como “chola de mierda en Kentucky”.

Dueño de una personalidad retraída, se sentía cómodo en soledad, detestaba las entrevistas por timidez porque no le gustaba la figuración además, que las entrevistas y los reportajes le incomodaban porque siempre le preguntaban las mismas cosas. Ni siquiera le gustaba promocionar sus propias obras a pesar de la presión de los editores a cuya presión cedió y es por ello que podemos saber algo más de este autor.

Con su mirada en la literatura, Ribeyro intento que visualizáramos los contrasentidos de la vida común. Como expresara Carlos Yusti en su artículo Navobok y el buen lector de novelas. “La literatura apenas puede mostrar las contradicciones de la existencia, esos borrones apresurados de la vida que en las grandes novelas tratan de transcribirse limpios, transparentes y en muchos casos como una metáfora que puede permitir a cualquiera ver la vida sin ningún énfasis de barbarie, la vida con esa música sencilla que busca darle a nuestro mínimo espacio cierta armonía a pesar del ruido producido por los traficantes de sombras y sus burocráticos cómplices.”

sábado, 1 de septiembre de 2012

Betina sin aparecer: la trascendencia del amor.

Hace pocos días, bajo el sello de LOM Ediciones se presentó el libro “Betina sin aparecer. Historia íntima del caso Tarnopolsky, una familia diezmada por la dictadura militar argentina, escrito por Daniel Tarnopolsky único sobreviviente de una familia constituida por cinco personas. 

A las 3 de la madrugada del 15 de julio de 1976, un grupo de militares argentinos entraron en el hogar de la familia Tarnopolsky. Se llevaron a Hugo y a Blanca, padres de Sergio, Daniel y Betina. Mas tarde, secuestraron a Betina desde la casa de su abuela. Ya tenían preso a Sergio en la ESMA, en donde estaba haciendo el servicio militar y simultáneamente habían secuestrado a Laura, su esposa, desde su casa. El único que sobrevivió fue Daniel, quien a los 18 años perdió a toda su familia en una noche.

La narración cuenta lo que vivió Daniel, luego del secuestro de su familia, su exilio en Israel primero y luego en Francia; la búsqueda permanente de los familiares desaparecidos; la lucha de su abuela None por saber de su hija y nietos; la formación de la agrupación de las Abuelas de la Plaza de Mayo. 

No solo es la historia de una familia, sino de la de miles en toda América Latina durante el tiempo en que el horror campeaba por nuestras tierras y que vieron como, en pocos momentos, su vida se destrozaba para siempre. 

Daniel, nos relata como a los 18 años experimento la desolación de quedarse solo, sin los abrazos, ni caricias ni consejos de sus padres, sin su hermano mayor que siempre había sido su héroe sin saber bien hacia donde caminar en la vida. 

Por suerte, en un tiempo en que las lealtades flaqueaban ya sea por el riesgo para la propia vida o la de la familia o bien, por quedar bien con el poder, Daniel contó con parientes más cercanos y con amigos incondicionales que lo protegieron de su pena y desesperación y lo ayudaron a enfrentar momentos tan duros.

La narración está estructurada de tal manera, que a la par de contar su historia, Daniel narra la presunta forma en que sus padres, su hermano y su cuñada fueron torturados al interior de la ESMA y luego asesinados; todo esto reconstruido, a partir de los relatos de sobrevivientes de las torturas en ese centro del horror argentino. 

También relata las torturas y las vejaciones a las que pudo haber sido sometida su hermana en ese centro de detención y posterior encierro de parte de uno de sus torturadores que la embaraza y luego, sustrae al niño manteniéndola encerrada, todo el primer año luego de su detención. 

Daniel, se entera que su hermana podría estar viva por lo menos diez años más tarde de la pérdida de su familia estando en el París de los ochenta, que veía el regreso de la democracia y que contenía los anhelos de justicia de muchos en América Latina.

Me imagino que Daniel, en los años de exilio y luego en los que se indagaron la suerte de su familia, en muchas oportunidades debió sentir que la historia caía sobre su espalda. 

Pero, a la luz del relato, creo que lo que lo sostuvo en pie y con fuerzas para seguir adelante, fue el amor por sus padres, su hermano y su hermana. Amor, que lo protegió, lo cuidó, lo envuelve y trasciende hasta el día de hoy al igual que a su hermana, viva en su corazón.   

Atrocidades cometidas por hombres contra hombres tal como diría Thomas Hobbes al plantear que como la sociedad surge de un acuerdo artificial, basado en el propio interés que busca la seguridad por temor a los demás. Por este acuerdo surge el Leviatán, "dios mortal" o poder absoluto ya que en el estado de naturaleza el hombre vive una guerra de todos contra todos. El hombre es un lobo para el hombre ya que en la vida social la utilidad y el apetito de poder son los factores determinantes del movimiento. Lo anterior, llena la historia de los últimos cuarenta años de América Latina, sin excepciones 

El camino se hace duro y Daniel, tiene la posibilidad de elegirlo y como, físicamente faltaron sus padres, su abuela fue el nexo entre su vida anterior, el punto de partida para compartir lo esencial en su existencia. Ella y otras mujeres que se enlazaron en su vida, fueron el espacio privado y el lugar de la resistencia a los intentos de olvidar la intimidad y familiaridad perdidas. 

Además, este libro, fue un camino de sanación tanto para él como para su familia, que les permitió alejarse del dolor, del enojo para reencontrarse en el amor. 

El filósofo francés, Gustave Thibon escribe “En la hora suprema del amor, te amo como si me fuera a morir. Porque el amor nos eleva por encima del tiempo y de las sombras que lo habitan. El amor es “fuerte como la muerte”, aquello por lo que el hombre se eterniza. Por eso el que ha amado de veras ya no teme la muerte; vive en paz porque siente ese parentesco misterioso que liga las dos fuerzas que rigen nuestro destino: puesto que el amor es muerte, también la muerte tiene que ser amor”.

Betina no aparece es un canto al amor, a la paz, a la verdad, a la esperanza y a la determinación de un hombre por no dejar de amar a pesar del dolor en su vida y es el mensaje que Daniel nos quiere transmitir: que tenemos que lograr salir de las guerras intestinas, porque nada, absolutamente nada justifica la muerte y la tortura de los hombres en manos de hombres.

Se publica libro sobre la identidad social y cultural del valle central de Chle.



El libro “Memorias, patrimonio y terremoto en haciendas y pueblos de Chile central” busca estudiar la construcción del imaginario cultural de Chile desde donde, apareció  el imaginario del pueblo, de lo que el país es y lo que  sería como sociedad y cultura.

Para los autores “estudiar el Valle Central es una suerte de arquelogía cultural de Chile. Allí estaban las grandes haciendas que sellaron Buena parte de las costumbres y modo de vivir de los chilenos y también los pueblos de donde provienen la mayor parte de las personas que hoy habitan en las ciudades y en la capital, Santiago, que hoy concentra a la mayoría”.

El libro, publicado por Editorial Catalonia, está ordenado en torno al valle central y todo lo que llega a estructurar y definer la memoria y la identidad de sus habitantes.

El contenido profundo y no siempre declarado de este concepto tan complejo de analizar surge de la experiencia de contacto y vida en común experimentada en los pequeños pueblos y haciendas del Valle Central durante siglos; en la homogeneidad étnica, real o atribuida, en la homogeneidad religiosamente católica de su gente, en los rituales festivos y el gusto de sus comidas, el vino que alegra el corazón, las guitarras y todo ello que constituye en definitivas cuentas “la cultura” o la así denominada “cultura chilena”.

El Valle Central, era “el lugar sin límites”. No habría habido país real si no hubiese existido un imaginario de un pueblo realmente existente. Y ese, el único que existía en este territorio, era el que habitaba el Valle Central de Chile.

Para poder realizar este estudio, el equipo de investigación dirigido por José Bengoa y compuesto por Iván Aguilera , Yuri Daber, Cecilia Delgado,  Cristal Mora,  Diego Planells, Nicolás Silva, Joan Sotomayor y Carol Valdivia, se instaló durnate un año en un caserí contiguo a la Antigua hacienda EL Huique, cuna de los Presidentes de la República en el siglo XIX; luego el equipop pasó otro añ en la localidad vecina de La almilla, la que hoy es la zona de producción de vinos finos más importantes del Valle Central donde los antiguos caserones se han transformado  en elegantes viviendas, bodegas y oficinas de vinos de exportación. Y luego, estuvieron otro largo año en Cobquecura, pueblo de la costa en el  valle del Itata, con un equipo de investigación social y cultural estable.

Un gran terremoto sacudió al Vale Central el 27 de febrero de 2010 y buena parte de los pueblos se destruyeron. Las casas de hacienda también sufrieron.

En ese contexto, surge el tema atrimonial respecto a la regunta de si acaso vale la pena mantener estos paisajes, casas, iglesias lo que este equipo  ha denominado “ese pequeño recuerdo del pasado”.

viernes, 24 de agosto de 2012

Los culpables: enfrentando y destruyendo las culpas.

Hace poco tiempo, se publicó en nuestro país, el libro “Los Culpables”, del periodista mexicano Juan Villorio de la mano de Lolita Ediciones.

En una de ellas, un mariachi participa de una película extravagante en la que el protagonista no tiene muy claro la razón de su éxito, en un momento en que ser mariachi no era bien visto por la sociedad y se culpa por que le gusta; la segunda trata de la contratación de un futbolista en decadencia para que juegue en un equipo del interior mexicano y por último del secuestro expreso de un periodista norteamericano que quería hacer un reportaje sobre la violencia que vive México.

Son cuatro historias, que tienen como hilo conductor el engaño, el viaje, la culpa y la violencia de nuestro mundo actual.

En las historias, todos los personajes viajan hacia el interior de México, en una metáfora que los traslada hacia a una relación, al diario vivir o a la memoria, que llevan sobre si con el objetivo saldar cuentas con culpas adquiridas en el pasado donde perdieron, ganaron, fueron felices o terminaron relaciones de pareja.

Los protagonistas de estos cuentos, iniciaron los viajes buscando cambios en sus vidas, involucrándose en asuntos y negocios aventurados y riesgosos en los cuales están interviniendo muchas personas, no todas honestas y sobre todo interviene la culpa.

Que es la culpa? La culpa es definida como un sentimiento de culpabilidad por ofensas imaginarias o por sentirse inadecuado. La culpa nos dice que hemos violado algo y que tenemos que buscar la forma de raparlo.
Nos podemos sentir culpables por muchas cosas incluyendo cuando decimos no, cuando comemos demasiado, pedimos ayuda, cuando traicionamos a alguien y mucho más.

El mensaje implicado en la culpa es: "Hice algo malo". Esta emoción nos lleva a la vergüenza, la depresión, la ansiedad, lástima de uno mismo, e inconcientemente estamos buscando nos castiguen y permanece zumbando en nuestras vidas, igual que las moscas en el verano, hasta que decidimos enfrentarla ya que el intento por esconderla fracasa.

Sigmund Freud pensaba que la culpa servía para regular de una forma efectiva el comportamiento social. Si la gente no se sentía culpable, decía, no se preocuparían mucho a la hora de lastimar a otros, ya sea emocionalmente o dañando su propiedad. ¿Pero para qué sirve la culpa?, ¿qué nos motiva a hacer?  Una teoría dice que la culpa es para castigar al yo. 

Otra dice que la culpa nos alienta a tratar de reparar el daño social que hemos hecho. Una tercera sugiere que nosotros sólo nos vemos motivados a actuar en orden de hacernos sentir mejor sobre nuestra trasgresión.

En el caso de los personajes de Los culpables, como no pueden silenciar los sentimientos de culpa con solo pedir perdón, inician un viaje o regresan al lugar donde causaron un daño, a lo mejor buscando librarse de la culpa porque este sentimiento provoca patrones contradictorios en la conducta de las personas.

Mientras que la felicidad nos hace acercarnos a otra gente, y la tristeza a alejarnos, la culpa provoca primero un alejamiento y luego un acercamiento e un intento de redimirnos ante la persona a la cual dañamos o que nos daño tratando de arreglar las cosas y hacer algún bien que repare el daño.

La culpa te fija en sucesos pasados, te sientes abatido molesto por algo que dijiste o hiciste y gastas tus momentos presentes afligido(a) por remordimientos de comportamientos pasados.

En Los culpables los protagonistas de los relatos, se sienten inmovilizados en el presente por situaciones del pasado y porque no pueden cambiar historia y tratan de romper el inmovilismo y aprenden de sus errores con acciones concretas

Juan Villorio, nos sorprende con estos relatos, que atrapan al lector en situaciones comunes pero tan bien contadas que hacen que el lector se sienta identificado y sienta como suyas, las culpas de los personajes.

Manuel Rojas vuelve a la cárcel de Valparaíso

El próximo sábado 25 de agosto a las 12:00 hrs, en la Sala Laboratorio del Parque Cultural De Valparaíso, PCDV (ex Cárcel), se presentarán dos libros sobre la obra del escritor Manuel Rojas, Premio Nacional de Literatura 1957, quien fuera distinguido como Ciudadano Ilustre de este puerto en 1958.
El evento es organizado por la Fundación Manuel Rojas junto a Ediciones LOM en el marco de la conmemoración del centenario de la llegada a Chile de este escritor.
En esta oportunidad dos nuevas publicaciones, se suman a la recuperación del legado literario de Rojas. “Un joven en La Batalla” recoge sus primeros escritos publicados en el diario anarquista “La Batalla”, entre los años 1912 y 1915.
El volumen incluye 13 crónicas breves y 2 poemas, algunos firmados con el seudónimo de “Tremalk Naik” siendo difundidos por primera vez. A lo anterior, se agrega textos de otros compañeros de Rojas en sus años de juventud. Cierra esta compilación,  un estudio realizado por Jorge Guerra Carreño en la que se presenta la existencia real de personajes novelados por Rojas, transformando algunos hechos de su vida en materia literaria. Esta publicación será comentada por Ignacio Álvarez, Doctor en Literatura, Director de la Fundación Manuel Rojas y académico de la U. Alberto Hurtado.
El segundo libro, “Su voz viene en el viento”, recopila toda la obra poética de Rojas aparecida en “Tonada del Transeúnte” (1927) y “Deshecha rosa” (1954) a lo que se agregan poemas dispersos de revistas y diarios que Rodrigo Carvacho Alfaro, académico oriundo de Valparaíso, recoge poniendo en relieve el origen lírico de la obra de este escritor.
Rómulo Hidalgo, académico de varias universidades porteñas, será el encargado de comentar este trabajo y la  presentación general estará a cargo del destacado crítico de Arte Justo Pastor Mellado, Director del PCDV.
Como una forma de recordar los ambientes que Rojas frecuentó en el Puerto, descritos en varias de sus obras, el evento contará con la interpretación de cuecas porteñas a cargo de un conjunto local.
Manuel Rojas nació el 8 de enero de 1896 en la ciudad de Buenos Aires. En 1899, sus padres se instalan en Santiago, pero en 1903 la madre, viuda, vuelve a Buenos Aires.Estudió hasta los 11 años. A los 16 años, cruza la cordillera de los Andes, realizando en Chile una seguidilla de trabajos: pintor, electricista, vendimiador, peón del Ferrocarril Trasandino, estibador,aprendiz de sastre, talabartero, cuidador de faluchos en Valparaíso, consueta y actor en compañías teatrales que recorren el país.

Casó con María Baeza con quien tuvo tres hijos. Trabaja en las prensas de la Universidad de Chile y en la Biblioteca Nacional. Es articulista en Los Tiempos y en Las Ultimas Noticias además de los medios ya mencionados. Labora en el Hipódromo Chile. Enviuda, vuelve a casarse, recorre Europa, Suramérica y Oriente Medio. Dicta cátedras sobre literatura chilena y americana en universidades de Estados Unidos y fue profesor en la Universidad de Chile. Falleció en Santiago el 11 de marzo de 1973.

Numerosos y significativos fueron los vínculos que Manuel Rojas mantuvo con Valparaíso, especialmente en los años de su juventud, que no solo no sólo fue el escenario donde desempeñó distintos oficios como el de “Guachimán”, guardián nocturno de embarcaciones, experiencia relatada en su primera novela “Lanchas en la bahía” (1932), sino que sus cerros fueron también refugio cuando, por sus ideas anarquistas, debió ocultarse de la persecución policial.
Como lo describe en su más conocida novela “Hijo de ladrón” (1951) a través de su alter ego literario, Aniceto Hevia, Rojas también pasó algunos días en la cárcel porteña, cuyas instalaciones actuales, transformadas en un activo centro cultural, servirán para la presentación de los libros mencionados.
Manuel Rojas vuelve a la cárcel de Valparaíso, ahora con sus escritos, testimonios, muchos de ellos, de sus duros primeros años donde, superando todo tipo de limitaciones como el hambre y la soledad, logró cultivar su “pequeña gracia de narrador”, como él mismo lo dijera alguna vez.
La importancia de este escritor ha sido destacada por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA) al instituir recientemente el Premio Iberoamericano de Narrativa Manuel Rojas. Este galardón será entregado por primera vez a fin de año, luego de que un jurado internacional decida el nombre de quien recibirá un premio de USD60.000.
Próximamente estará disponible también el nuevo sitio web de la Fundación Manuel Rojas con numeroso material inédito y una exhaustiva cronología que destaca los momentos más relevantes de su vida y obra en el contexto nacional y mundial.

Exposiciones y premiaciones para celebrar Día de la fotografía en Chile

Este domingo, entre las 12:00 y 18:00 horas, se realizará una serie de actividades dirigidas a la comunidad, como una exposición de destacados fotógrafos regionales, un mercado con venta y exhibición de productos y otros entretenidos panoramas para la familia.

En el Museo de Arte Contemporáneo (MAC) del Parque Forestal, se expondrán las mejores obras resultantes de los talleres de fotografía realizados por el Consejo de la Cultura en todo Chile, en los que participaron 180 alumnos. Esta muestra se presentará en el MAC únicamente este domingo, para luego trasladarse al Museo Histórico Nacional, donde se exhibirá por dos meses.

También se efectuará un mercado fotográfico, que será una instancia de venta y exhibición de productos como cámaras antiguas, libros y fotografías de autor. Por otra parte, destacados fotógrafos nacionales proyectarán su trabajo al interior del MAC. Asimismo, el Taller Huelén junto a otras agrupaciones ofrecerán diversos objetos para el público interesado en artículos fotográficos y Lomography Chile estará promocionando sus productos y el portal de fotografía “Foto Espacio” estará inscribiendo nuevos suscriptores para su página web.

Paralelamente, en regiones se inaugurarán las exposiciones que reúnen los mejores trabajos de los fotógrafos que participaron en los talleres liderados por destacados artistas nacionales, organizados por el Consejo de la Cultura.

Luciano Cruz-Coke, Ministro de Cultura, destacó que “uno de los objetivos centrales de esta programación es realzar el carácter de la fotografía, llevándola a distintos rincones del país ya que como Consejo de la Cultura nos interesa llegar a cada vez más chilenos con expresiones artísticas de calidad, como estas muestras fotográficas, que se presentarán en cada región y que dan cuenta del talento que hay en Chile”.

A partir del 22 de agosto, el espacio urbano más tradicional de Santiago, el eje Alameda, se sumará a las celebraciones del Día de la Fotografía ya que las 60 mejores imágenes de los fotógrafos que participaron en los talleres del CNCA, se instalarán en los paraderos del Transantiago, entre Estación Central y Escuela Militar manteniéndose, la exhibición, hasta el 22 de septiembre.

Sobre esta exposición, el Secretario de Estado manifestó: “los trabajos de artistas locales nos mostrarán un panorama en torno a la mirada local en cada zona del país y además permitirá que los transeúntes puedan conocer diferentes miradas de fotógrafos nacionales”.

Como parte de las actividades conmemorativas del Día de la fotografía se entregará el Premio a la Fotografía Joven Rodrigo Rojas De Negri 2012, que recayó en la fotógrafa Zaida González, quien cuenta con una vasta lista de exposiciones en Chile y el extranjero.

Esta es la sexta vez que se entrega este premio, que se instauró como homenaje a la figura del joven fotógrafo Rodrigo Rojas De Negri, quien murió en 1986, producto de quemaduras recibidas en una protesta mientras desempeñaba su labor de reportero gráfico independiente. 


Zaida González Estudió Fotografía Publicitaria en el IP Alpes (2000), y Medicina Veterinaria en la U. de las Américas. Entre sus exposiciones en Chile destacan: “Recuérdame al morir con mi último latido”, Sala 13 Instituto Alpes 2010; “Malignas Influencias” en el Museo Histórico Nacional 2007; “Conservatorio Celestial” Galería AFA 2007; “Por favor concedido” MAVI 2006; “Chile 30 años” en el Museo de Arte Contemporáneo 2003.

Ha ganado la beca Fondart 2005, 2008, 2009 y 2010, y ha sido nominada a los premios Rodrigo Rojas Denegri 2007 y 2008, y Altazor 2007 y 2011.

Este año, el jurado estuvo compuesto por más de 60 especialistas, entre ellos destacados artistas como Paz Errázuriz, Luis Poirot y Jorge Brantmayer.

Detectan nueva floración nociva en los fiordos de la Patagonia

  Un nuevo evento de Floración Algales Nocivas (FANs) se registró recientemente en la zona de Hornopirén, en la región de Los Lagos, produci...