En el marco de los 180 años de la invención de
la fotografía en el mundo, la Biblioteca Nacional de Chile y la Embajada del
Japón en Chile, conmemoran el centenario de la llegada a nuestro país de
Kyutaro Tsunekawa (1898-1985), reconocido fotógrafo nipón.
En noviembre del año 2005, el Archivo
Fotográfico y Audiovisual de la Biblioteca Nacional, adquirió una selección de
más de 1.200 fotografías (negativos y copias en papel) del estudio fotográfico
de Kyutaro Tsunekawa.
Posteriormente, su familia realizó una
generosa donación de más de 25.800 fotografías que fueron tomadas en el
estudio.
Estos aportes, constituyen el pilar de la
exposición “Tsunekawa: 100 años de retratos" que recorre la vida y obra
del artista visual en nuestro país.
Gracias a la labor realizada por el Archivo
Fotográfico y Audiovisual con el material recibido, desde el 29 de agosto el
público podrá recorrer este verdadero tesoro de la fotografía de estudio en
Chile.
La muestra, que conmemora los 100 años de la
llegada del fotógrafo japonés a Chile, hace un recorrido por su vida, con
énfasis en su estudio, su particular trabajo como retratista y en los aspectos
técnicos y estéticos de su actividad.
A través de sus retratos, es posible un
acercamiento a la sociedad de la época y testimoniar la evolución que tuvo este
género, con el pasar de los años. El estudio de Kyutaro Tsunekawa (al que llamó
“Estudio Tunekawa” para facilitar su pronunciación) representa la historia y el
desarrollo de los estudios fotográficos durante el siglo XX, los cuales hoy
prácticamente han desaparecido.
Para el director del Servicio Nacional de
Patrimonio Cultural, Carlos Maillet, es destacable que “este patrimonio da
cuenta de casi un siglo de retratos, donde podemos ver reflejado el semblante
de nuestra sociedad y su evolución, a través de distintas décadas y que el
Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, agradece profundamente la importante
donación del archivo del Estudio Tunekawa por parte de su familia”.
Soledad Abarca, jefa del Archivo Fotográfico y
Audiovisual comenta sobre el proceso y la importancia de esta donación.
“Para el equipo del Archivo Fotográfico y
Audiovisual de la Biblioteca Nacional, el proceso de recepción del valioso
archivo del Estudio Tunekawa ha significado un enorme desafío, ya que estamos
recibiendo un gran volumen de material fotográfico, que presenta diversas
técnicas tales como placas de vidrio, negativos flexibles de acetato y
numerosas copias en papel retocadas e iluminadas.
Asimismo, ha sido una experiencia maravillosa
poder conocer en profundidad la forma de trabajo de un fotógrafo de estudio,
que tenía una exigencia extraordinaria en su trabajo. La familia Tsunekawa ha
resguardado celosamente este legado, no sólo de las fotografías, sino también
equipos, herramientas y diversos documentos”.
Ko Takahashi, Agregado Cultural de la embajada
nipona en Santiago, destaca que “este hito es una ocasión relevante ya que es muy
significativo que la Biblioteca Nacional, exponga este valioso trabajo
fotográfico que une a generaciones de chilenos con Japón, a través del arte y
de la vivencia cotidiana.
“Asimismo, resulta un ejemplo de entrega y
profesionalismo y es nuestro deseo, que la comunidad japonesa en Chile y sus
descendientes, sigan realizando su labor con la mayor dedicación y que fruto de
ello, las actuales y futuras generaciones continúen fortaleciendo los lazos de
amistad que nos unen tan profundamente a japoneses y chilenos".
La muestra, incluye 9 pantallas con decenas de
retratos y dos pantallas, con entrevistas de personas que visitaron el Estudio
Tunekawa en su niñez o adolescencia y que han guardado, con mucho afecto el
trabajo del fotógrafo.
Sus relatos, forman parte esencial de la
historia de este estudio y de su trabajo ya que gracias a ellos, es posible comprender
el metódico trabajo y la atención a los detalles que llevaron a Tsunekawa a
convertirse en un referente del medio.
Junto a lo anterior, se exhiben más de 30
retratos en gran formato. La familia del fotógrafo, además, facilitó objetos
utilizados para las fotografías de primera comunión (como cruces o rosarios),
juguetes, herramientas, materiales, publicidad del estudio y fotos enmarcadas,
junto con una de las cámaras de estudio empleadas por Tsunekawa.
La invitación es a recorrer esta increíble
muestra del archivo del Estudio Tunekawa, desde el 29 de agosto en la Galería
de Cristal.