jueves, 11 de enero de 2024

¿Es la universidad hoy la llave de acceso a un mejor futuro?

 Obtener un título universitario: ¿Una vía de progreso o una falsa ilusión?

En Sueños de cartón, el antropólogo Pablo Ortúzar analiza la hiperinflación de títulos y la sobreoferta de carreras universitarias en Chile, un fenómeno que ha cosechado generaciones de profesionales desilusionados y endeudados.

En el libro, el autor conecta la frustración provocada por el sistema educativo actual con algunos de los hitos políticos y sociales que han marcado al país en el último tiempo.

El próximo martes 16 de enero se conocerán los resultados del proceso de postulación a las universidades. A propósito de esto, es común que por estos días se publiquen los rankings de las carreras mejor pagadas o con mayor empleabilidad en Chile.

Pero, ¿cuál es la realidad que esconden estas cifras? ¿Es la universidad hoy una llave de acceso a mejores oportunidades económicas y sociales, o solo una ilusión?  

A partir del despliegue de datos reveladores, el antropólogo social Pablo Ortúzar desmenuza en su libro Sueños de cartón el problema de la sobreoferta de carreras profesionales y la hiperinflación de títulos universitarios en Chile, un fenómeno que ha cosechado generaciones de profesionales desencantados con el sistema educativo y, en muchos casos, endeudados producto del compromiso financiero contraído para pagar sus estudios.  

En la publicación se desmenuzan las causas que llevaron al crecimiento de la oferta académica y al aumento exponencial de las tasas de matrículas universitarias en las últimas décadas. "Los títulos profesionales y los billetes tienen algo importante en común: son títulos de valor, que representan cierto poder que depende de su escasez relativa", menciona el autor. 

Hoy, se explica en el libro, las instituciones educativas ofrecen la acreditación de lo estudiado. Y es eso, precisamente, lo que busca la mayoría de las personas que ingresan a la universidad. El interés por obtener y producir conocimiento ha quedado, entonces, relegado a un rol secundario.

Esta jerarquización de objetivos, se explica en el libro, ha arrasado con el sistema universitario, pues ya no hay interés real en impartir −y acceder− a contenidos de calidad: el foco ahora son los grados académicos. 

De acuerdo con Ortúzar, la promesa de la educación universitaria como un paso para acceder a un mundo de seguridad y progreso social se desmorona cuando, luego de salir de la universidad, los profesionales no consiguen buenos empleos o no obtienen la recompensa económica esperada. 

En esta perspicaz visión de la situación social y política chilena, Ortúzar argumenta por qué la inflación de títulos universitarios es fundamental para comprender eventos cruciales, como la revuelta social de 2019 o el ascenso del Frente Amplio al poder.

 En el libro se menciona la existencia de una «contraélite» conformada por aquellos profesionales que no lograron acceder a la élite social, a pesar de tener estudios universitarios.

De acuerdo con Ortúzar, "el Frente Amplio opera como una contraélite desde el momento en que se dispuso a utilizar el estallido social como un medio para desplazar a la fuerza a la élite política previa, cosa que no lograron del todo, aunque conquistaron el poder y sus cargos".   

Sueños de cartón permite entender la complejidad del actual sistema de educación superior y sus efectos en la sociedad chilena moderna. "Recién está comenzando a reventar la burbuja de los títulos. La corrección será larga, lenta y dolorosa", advierte el autor.

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