La obra cuenta la historia de un grupo de profesores que se ve desafiado por el
repentino ingreso al establecimiento educacional de un niño que dejó de hablar,
abordando y reflexionando así sobre temáticas como la docencia, la inclusión y
el sistema educativo en Chile.
Una producción
de Teatro Bicho Raro, cuenta con las actuaciones de Bárbara Santander,
Valentina Acuña, Karyna Saifudinova, Jacob Reyes Cona, Alex Vidal Salas y
Sebastián Trincado, bajo la dirección de Juan Carlos Maldonado (El
Príncipe, Las carpas) y con dramaturgia de Alex Vidal (Las carpas).
“La
temática sobre el sistema de educación de esta obra, es una anécdota para
develar las relaciones humanas, cómo nos comportamos frente a una situación que
pareciera ser un conflicto, sin contar con las herramientas necesarias como
para resolverlos, herramientas que debiera entregar las entidades
representativas de cada sector social.
Nos preguntamos entonces, ¿este cuerpo docente es victimario de este sistema o es tan víctima como el alumnado que recibe este tipo de educación?”, explican Alex Vidal y Juan Carlos Maldonado.
Para
la obra, el equipo investigó a través de documentales, lectura, testimonios
reales y experiencias cercanas sobre el sistema de educación en Chile y cómo
los establecimientos educaciones se enfrentaban a la inclusión, por ejemplo.
Un
trabajo que logró un gran impacto en la audiencia, ya
que, en su primera
temporada, Cuerpo docente agotó varias de sus funciones. Por ello, el
enero teatral de Teatro del Puente la trae de vuelta a su cartelera.
“Volvemos a este maravilloso teatro, que siempre nos ha abierto los brazos y nos acoge con mucho cariño. Nuestra primera temporada en Teatro del Puente fue maravillosa, tuvimos una muy linda recepción del público y nos repetimos el plato ahora en enero; un mes de teatro”, agrega Juan Carlos Maldonado.
Reseña
Cuerpo docente es una comedia negra que cuenta la historia de un grupo de profesores que se ve desafiado por el abrupto ingreso al establecimiento de un niño que dejó de hablar.
El objetivo de hacerlo hablar se vuelve imperioso, develando las carencias y el agobio sistemático de una norma obsoleta.
La presión de responder a las exigencias del sistema educacional, la inminente visita de Inspectoría Nacional y el objetivo de hacer hablar al niño a toda costa, hará que se planteen diversas estrategias para lograr su objetivo y con ello, se expongan a sus más profundos cuestionamientos, miedos y debilidades: “¿somos victimarios o víctimas de este sistema educacional?”.
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