Desbordadas realiza donación de bordado comunitario a la UMCE

 Construir y activar la memoria a través del bordado fue el pulso que reunió a estudiantes y profesoras del departamento de artes visuales de la UMCE, alrededor de un lienzo, durante las movilizaciones sociales del 2019. 

Concebida la acción de bordar como otro modo de escribir y dejar testimonio de un momento clave en la historia política de nuestro país, durante el mes de noviembre del 2019, activó un nuevo bordado con los rostros y nombres de las víctimas de la represión policial, propiciando el diálogo horizontal y abierto en torno a esas historias y las propias. Cada hebra comenzó a formar parte de un tejido común extenso, desplazándose a distintos territorios y conyunturas, lo que dio vida a una metodología de vinculación entre saberes y al “Desbordadas Colectivo”.

Este año, los dos lienzos, de rostros y ojos, fueron donados a la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, para integrar el acervo de su patrimonio universitario. La donación se da en el marco del proyecto “¡Hay una historia aquí! Mapeando memorias y patrimonios UMCE para la comunidad escolar”, gestionado por la Dirección de Vinculación con el Medio y Extensión de la universidad y financiado por el Ministerio de Educación.

Para el proyecto de mediación patrimonial, esta donación es relevante porque dialoga con el acervo histórico y artístico de la UMCE, pero desde un lugar especial, el ser gestado al interior de la universidad y por su carga simbólica como testimonio de nuestra historia reciente. 

“Desbordadas Colectivo” está integrado por Catalina González, Constanza Fica, Daniela Bustos, Génesis Marín, Joan Araya, Johane Bravo, Lilith Rodríguez, Maira Nadjar, María Victoria Polanco, María Elena Retamal, Miriam Silva, Nicole Cortés, Patricia Raquimán, Roccio Lee, Valeria Saavedra y Ximena Callata. Núcleo que ha permitido movilizar, resituar, exhibir e intervenir distintos espacios culturales de la región metropolitana con la acción del bordado colectivo. 

Durante el año 2019, el lienzo sale de la Universidad y se desplaza a la Villa O’Higgins en trabajo conjunto con el colectivo Asamblea Territorial Tierra Florida. También se exhibe en la Población Los Copihues de la Florida, en la Población La Bandera, comuna de San Ramón, y en la Villa Santa Carolina, en la comuna de Macul.

Además, es parte de fechas emblemáticas y movilizaciones como las Manifestaciones del 25 de noviembre (Día Internacional contra la Violencia Contra las mujeres), el 10 de diciembre (Día Internacional de Los Derechos Humanos) y el 8 de marzo (Día internacional de La Mujer). Precisamente, el 8 de marzo, del 2022, el Departamento de Artes Visuales, inauguró la muestra “Cartografía textil” en vinculación a Bibliometro y con una itinerancia en los módulos de las estaciones Franklin, Plaza Egaña, Quinta Normal y Bellavista de La Florida.

Durante el presente año, en marzo, también se presentó en el Museo de Arte y Artesanía de Linares.

Para Johane Bravo, el bordado colectivo es una metodología de vinculación de saberes, sin jerarquías y de aprendizaje mutuo. “Saberes que se articulan con el presente, que facilitan y restablecen la identidad comunitaria y que facultan a los sujetos y sujetas de ese espacio a sentirse pertenecientes de ese lugar, y ser constructores y constructoras de ese territorio, desde este ejercicio de hacer lo textil”, expone quien, además, rescata cómo este modo de hacer no sólo activa movilidad a una comunidad, sino que, también, fortalece un sentido de memoria y archivo de un territorio compartido.

María Victoria Polanco, coordinadora de proyectos externos de la Dirección de Vinculación con el Medio y Extensión de la UMCE, recupera la importancia de esta donación para la universidad, principalmente, por ser una materialidad que se comenzó a gestar al interior de la casa de estudios y, segundo, por ser un testimonio de nuestra historia reciente como país que “permitirá que nuevas generaciones puedan dialogar y aprender, desde un gesto de archivo concreto, acerca de nuestros relatos como sociedad.

El lienzo, en sí mismo y como espacio de mediación artística, ya nos ha permitido realizar algunas experiencias con profesores/as donde les hemos invitado a activar el bordado colectivo como lugar de reflexión  y acercamiento a las prácticas artísticas a través de lo patrimonial”, comenta, rescatando las dos jornadas vividas el pasado 30 y 31 de agosto, junto a la comunidad docente de la comuna de Renca, quienes visitaron la UMCE para conocer la metodología y experimentar el bordado comunitario de “Desbordadas Colectivo”.

Participaron de la actividad profesores/as de artes visuales y educadoras de párvulos de Jardines Infantiles y Escuelas Públicas de la comuna de Renca.