Cómo aprovechar septiembre para crear y potenciar el hábito lector

Cuatro de cada cinco niños y niñas en América Latina no podrán comprender un texto simple, según un informe divulgado en junio de este año por el Banco Mundial - UNICEF en colaboración con UNESCO.  

¿Y qué pasa específicamente en Chile? Antes de la pandemia los niveles de lectura en nuestro país ya eran complejos. Hoy se estima que 158 mil niños y niñas pasan a segundo básico sin lograr un nivel adecuado de lectura. 

“La introducción a la lectura desde una edad temprana es fundamental para desarrollar este hábito en los niños y niñas, lo que a la vez es clave para el proceso educativo integral del menor. Y para ello, no es necesario esperar a que aprendan a leer y a escribir.

De hecho, se puede hacer antes y en ese aspecto, septiembre, mes patrio donde tenemos 4 días feriados, es un momento perfecto para comenzar”, explica Katherinne Urzúa Cueto, Jefa de Marketing y Comunicaciones de editorial Caligrafix (https://www.caligrafix.cl/).  

“Si bien es cierto que el rol del docente es importante para fomentar la lectura de los niños y niñas, lo más  esencial es que la familia esté involucrada en este hábito, lo cual trae consigo beneficios para el desarrollo del área socio afectiva”, comenta Paulina Schwarze, Subdirectora editorial de Caligrafix.

Para ello, la experta entrega las siguientes recomendaciones para fomentar el hábito lector de sus hijas e hijos, de una forma entretenida y efectiva.  

Los niños y niñas aprenden desde el ejemplo, por ende, desde muy  temprana edad, ver a sus papás leyendo y disfrutando de un libro, hará que sientan curiosidad por esa actividad. Y nunca es tarde para hacerlo: si no forma parte de las costumbres habituales, se pueden incorporar con lecturas gratas y motivantes para cada uno.

Normalizar la lectura: Esto también es muy importante, ya que ver libros en la casa o ver a las personas leyendo, hará que el menor vea la lectura como una actividad tan cotidiana como comer o jugar. Se sugiere hacer visitas a bibliotecas o librerías con el fin de elegir las lecturas.

Establecer rutinas lectoras también es importante. Por ejemplo, una buena idea es, compartir un momento de lectura con el niño o niña antes de dormir, o dejar un espacio para realizar esta actividad el fin de semana o en días feriados.

También, si es posible, hacer el hábito de leer todos los días durante 10 ó 15 minutos. Para ello, la línea Viaje Literario de Caligrafix, ofrece una amplia variedad de títulos de literatura infantil y juvenil de reconocidos autores e ilustradores. Además, con cada una de las obras es posible potencial la imaginación y el gusto estético.  

Permitir que niños y niñas participen de la actividad. 

Para esto, puede ser que sea él o ella quien elija lo que se va a leer o algo tan simple, como permitirle que dé vuelta la página, que finalizada la lectura comente qué le gustó o que comparta su experiencia lectora con otros integrantes de la familia, como hermanos, abuelos, primos. 

Hacer de la lectura una actividad entretenida y no algo que pareciera una “obligación” o una “tarea”.  

Siempre agregar como alternativa de regalo, un buen libro sobre algún tema o personaje que sabes que a tu hijo o hija le gustará, de acuerdo a sus intereses. 

En su compromiso por contribuir a la educación de los niños y niñas de Chile, Caligrafix elabora innovadores cuadernos de actividades caracterizados por una metodología pedagógica clara y secuenciada y a la vez lúdica.

Además de facilitar el trabajo docente, los cuadernos Caligrafix son una valiosa herramienta de apoyo para los padres, y garantizan aprendizajes altamente eficaces. Junto a lo anterior, la editorial Caligrafix cuenta con una línea de literatura infantil y juvenil: Viaje Literario.