Un Nuevo “Plan de Trabajo de Revitalización
Lingüística y Cultural” afronta el desafío de fortalecer la lengua Rapa Nui
luego que el Ministerio de Educación realizara en la isla, el primer diálogo
ciudadano, que tuvo lugar en octubre del 2014, con la pregunta ¿Cuál es la
educación que soñamos?
Para realizar este plan, que surge en el marco
de la reforma educacional en Chile, se consideró la aplicación de una encuesta
sociolingüística, en la cual participaron 542 personas y el objetivo de la
aplicación de la encuesta sociolingüística, fue determinar el grado de
vitalidad del idioma rapa nui, de acuerdo a los lineamientos establecidos por la UNESCO.
Sus resultados indican que goza de un alto
grado de valoración social y prestigio en la comunidad, incluso entre quienes
no la hablan, que es un elemento definitorio de la identidad de los hablantes y
que existen escasas oportunidades de aprenderla fuera del seno familiar,
constatándose además, que la lengua es un elemento definitorio de la identidad
de los hablantes.
Una de las conclusiones obtenidas, fue que en
cuanto al grupo etario, más del 70% de mayor edad (65 años o más) presenta un
nivel alto de competencia lingüística.
Sin embargo, a medida que disminuye la edad,
la proporción de cada grupo etario que presenta un alto nivel de competencia
disminuye gradualmente, alcanzando sólo un 16,7% en el grupo más joven (8 a 12 años).
Los datos también indican que la lengua rapa
nui predomina en los ámbitos de uso privado y de entorno social, familiar y de
actividades tradicionales, mientras que el español es el que domina los ámbitos
de uso nuevos y públicos y que se requiere una acción más decisiva por parte
del Estado y de las instituciones públicas para su protección y fortalecimiento.
Este proceso de construcción participativo
tuvo su inicio el año 2014, cuando el Ministerio de Educación de Chile
(Mineduc) recorrió todas las provincias del país para levantar información
ciudadana sobre cuál era la reforma educacional que soñaban.
Andrés Soffia, coordinador de la Unidad de Inclusión y
Participación Ciudadana del Mineduc, explicó que “el pueblo Rapa Nui indicó
estar de acuerdo con cambios estructurales del sistema educativo, siempre y
cuando se considerara y respetara la educación intercultural, la cosmovisión
indígena y la historia de los pueblos, entre otros elementos, que resguarden
una educación pertinente con los territorios”.
Es así que, en consecutivos espacios de
relación entre el pueblo de Rapa Nui, particularmente las comunidades
educativas, el Mineduc y la
UNESCO, surgió la preocupación de analizar la situación
actual de su lengua y cultura, transformándose en uno de los objetivos del
proyecto.
El proyecto de revitalización lingüística y
cultural comenzó, diagnosticando el estado de competencia lingüística de la
lengua rapa nui en la población isleña, conociendo la percepción de la
comunidad respecto de la educación, qué lugar ocupa en ella su la lengua y el
patrimonio cultural.
Fue así como se recopiló, junto a la
comunidad, información sobre las medidas que los propios habitantes de la isla,
consideraban necesarias para el fortalecimiento lingüístico y cultural.
El trabajo realizado durante la primera fase
(2015) concluyó con la elaboración de un diagnóstico de la situación
lingüística y cultural isleño junto con el diseño y aplicación piloto de una
encuesta sociolingüística, con el propósito de determinar el estado de
vitalidad de la lengua originaria.
La segunda fase del proceso (2016), consistió
en el análisis de los resultados de la aplicación piloto y la construcción del
instrumento definitivo, el cual fue aplicado entre octubre y noviembre de 2016.
Durante el año 2017 se avanzó en el análisis
de los resultados de la encuesta y la definición de un plan de acción, en
concordancia con el diagnóstico realizado, en conjunto con los distintos
equipos del Ministerio de Educación de Chile implicados en el proceso.
La propuesta se articula en torno a tres ejes.
La primera es participación y diálogo epistémico e intercultural; el segundo se
basa en el diseño de política y práctica institucional intercultural y finalmente,
la adecuación de normativas internas y externas.
Para el periodo 2018-2021 se diseñó un plan de
acción, que considera diversas medidas en las siguientes líneas de acción: desarrollo
comunicacional permanente para sensibilizar, difundir acciones en curso y
resultados; participación y fortalecimiento del uso de la lengua desde y en las
comunidades y familia; gestión institucional intercultural; desarrollo
curricular formal e informal; formación continua de docentes, educadoras (es) tradicionales
y sabios rapa nui; desarrollo de materiales didácticos de inmersión,
bilingüismo y del Sector de Aprendizaje en Lengua Indígena y, finalmente, sistematización, seguimiento, acompañamiento
y asesoría en el proceso.
Atilio Pizarro, jefe de la Sección de Planificación,
Gestión, Monitoreo y Evaluación de la Oficina Regional
de Educación para América Latina y el Caribe, señaló que “era necesario que
este fortalecimiento lingüístico y cultural se concretara más allá de
contenidos o materias de los programas nacionales educativos, sino de manera
transversal en todo el quehacer de los habitantes de Rapa Nui”.
“Creemos que lo que vivimos hoy, es un evento
esperanzador para la consolidación del reconocimiento de la riqueza de la
diversidad cultural en Rapa Nui y su aporte único a una mejor sociedad para
todos”, señaló Pizarro.
“Si no
existen niños que hablen nuestra lengua y nosotros los adultos vamos desapareciendo,
cuando estos niños estén grandes y se conviertan en padres, no van a hablar el
idioma, no podrán enseñárselo a sus hijos”, lamenta Vicky Haoa, miembro de
la Academia
de la Lengua Rapa
Nui.