El pasado jueves 21 de junio, a las 19 horas, en el
Auditorio del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, se realizó la donación de la colección completa de la publicación que circulara
clandestinamente durante los tiempos de dictadura bajo el nombre de “El
Humanista”.
Este periódico, que se publicara por vez primera en mayo de
1984 con ocasión del nacimiento a la vida pública del Partido Humanista de
Chile, intentó constituirse en una publicación mensual y buscó ampliar su
tiraje hasta llegar a los 30.000 ejemplares, siendo distribuido mano a mano,
sorteando todas las restricciones del Estado de Sitio.
Entre sus páginas, nos sorprende encontrar una entrevista a
Clotario Blest, realizada en su casa del barrio Diez de Julio. También el hecho
que desde un comienzo el tema de la equidad de género y los derechos de la
mujer fueran relevados significativamente. La denuncia de la cesantía, la tortura
y la violencia, las diferentes formas de discriminación y el excesivo gasto
militar resultan recurrentes. Se peralta el cooperativismo y se critica
fundamentadamente, a solo tres años de su creación, al sistema de AFP.
El tamaño tabloide y el papel prensa deben ser reemplazados
durante algunos meses por formatos más pequeños y económicos, ya que cuesta
conseguir los dineros para producir con regularidad. De hecho, hay meses en que
la edición salta y la periodicidad se vuelve bimensual o se distancia aún más.
Pero se vuelve a retomar esta publicación realizada exclusivamente por
voluntarios, militantes que en diversas ocasiones arriesgan su pellejo por
salir a distribuir el llamado a la disidencia.
“El Humanista” se sostuvo durante tres años, hasta mayo de
1986. Una vez recuperada la democracia, volverá a ver la luz en diversas
ocasiones, sin la regularidad de antes, con carácter funcional a las campañas
parlamentarias o presidenciales emprendidas por el Partido.
La donación que se hizo al Museo abarca el período 1984-1986
y comprende quince ediciones. Constituyen un testimonio de la lucha organizada
contra la dictadura por parte de quienes formaban parte entonces de la nueva
generación que se hizo presente en el espacio político. Son un pequeño aporte a
nuestra historia, un color más del arco iris de esperanza que un día movilizara
al pueblo chileno.
El Director del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos,
Francisco Estévez, recibió la colección de manos del diputado Tomás Hirsch,
quien entregó las quince ediciones a nombre del Partido Humanista.
Luego de breves testimonios, el diputado Raúl Florcita Alarcón recreó algunas
de las canciones de oposición a la dictadura.
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