Lautaro Mura es
un director de alcance internacional y mirada contemporánea. Hace ocho
años vive en Alemania, donde habitualmente trabaja con ensambles y
orquestas que interpretan creaciones de vanguardia y exploran la relación entre
música y otras disciplinas artísticas.
Establecido hoy en Colonia, es uno de los
fundadores del Kommas Ensemble y de Broken Frames Syndicates,
además de un invitado habitual de agrupaciones repartidas por Europa
Sin embargo, su origen está en Santiago. Estudió
composición en la Universidad de Chile, con Cirilo Vila y se formó como
director con David del Pino Klinge, actual director artístico de la Orquesta
Clásica Usach. En 2014 viajó a Düsseldorf, para hacer un posgrado en
la Robert Schumann Hochschule y luego continuó su formación en Frankfurt,
con una beca del prestigioso Ensemble Modern, para trabajar como
director de la International Ensemble Modern Academy
Con todo ese bagaje, Lautaro Mura volverá al país
para dirigir a la Orquesta Clásica Usach en tres conciertos gratuitos: el
primero se realizará el miércoles 18 de mayo (19:30 hrs.) en el Teatro
Aula Magna Usach, con inscripción previa en este formulario.
Luego, estarán en el Centro Cultural Lalo Parra
de Cerrillos (martes 24, 19:00 hrs.) y la Casa de la Cultura Violeta
Parra de Cerro Navia (miércoles 25, 19:00 hrs.).
“La Orquesta Clásica Usach estuvo presente durante
toda mi primera etapa formativa como director”, cuando estudiaba con David
del Pino y se renovó en 2015, cuando condujo al elenco en la que fue mi
última visita a Chile. Me hace mucha ilusión volver, con más años y
bastante más experiencia, a compartir ideas y música”.
El programa estará centrado en dos figuras capitales
de la historia de la música, aunque será una oportunidad para escuchar
composiciones poco acostumbradas en la cartelera local: el Idilio de
Sigfrido, de Richard Wagner (1813-1883) y la Sinfonía Nº 4 en Si
bemol mayor, op. 60 de Ludwig van Beethoven (1770-1827).
“Son obras claves de la literatura musical occidental
y constituyen pilares fundamentales del repertorio sinfónico, pero no
responden a las ideas preconcebidas que tenemos de estos compositores”,
anticipa Mura.
“Poco común
fue también para Wagner el Idilio: él es sinónimo de ópera,
texto y escena, de ‘la obra de arte total’, pero esta es una pieza puramente
musical, una suerte de pequeño poema sinfónico como regalo de cumpleaños para
su esposa Cósima; es una obra a pequeña escala, totalmente inusual si
pensamos en sus monumentales aparatos operáticos”.
Ocupado actualmente sobre todo con creaciones
actuales, Lautaro Mura establece un vínculo entre esa labor y el
repertorio que abordará con la Orquesta Clásica Usach.
“Estas músicas también fueron ‘música
contemporánea. Beethoven fue un compositor que abrió nuevos caminos y fue
cuestionado o incomprendido, en su tiempo por sus ideas vanguardistas.
Lo mismo pasa con Wagner, que estuvo permanentemente mirando de frente al futuro. Ese espíritu me identifica y espero mostrar detalles de esa mirada en mi trabajo con la orquesta”.
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