Este 23
de noviembre el Museo de la Memoria y los DDHH inaugura “Lo que nos
queda por hablar”, una exposición que ofrece conexiones, vínculos y
discusiones sobre las maneras en que construimos nuestras memorias.
La
muestra busca acercar puntos de vista de distintas generaciones que
problematizan aspectos de estos pasados, a través de videos, fotografías,
instalaciones, pinturas y dibujos, exhibidos en un diálogo con piezas de la
colección del Museo.
Esta
exposición se da en un momento clave tanto para Chile, por la conmemoración
de los 50 años del golpe, como para España, que se encuentra en pleno
proceso de implementación de la ley de memoria histórica.
“Para
nosotros es fundamental conectar con la historia chilena y con ese imaginario
de respuesta a la dictadura que hemos mirado con admiración. En España se están exhumando
cuerpos de fosas comunes, lo que genera muchas resistencias desde el sector de
la extrema derecha y reacciones sociales, es un buen momento para revisar
nuestras memorias del franquismo”, cuenta Marco Godoy, artista
español que participará de la muestra.
En
esta misma línea, la directora ejecutiva del Museo de la Memoria y los Derechos
Humanos, María Fernanda García, recordó la relación entre nuestro país y
España en esta materia, sellada en julio de este año con la firma de un
protocolo de cooperación entre el Museo y el gobierno español a través de la
Secretaría de Memoria Democrática para el intercambio de experiencias y el
desarrollo de acciones conjuntas.
Señala,
“tenemos historias comunes y
acercarnos nos permite fortalecer la defensa de la democracia y los derechos
humanos, especialmente mirando hacia las nuevas generaciones, en
un contexto de creciente violencia mundial”, afirmó.
La
exposición, organizada por el MMDH, ha recibido el apoyo del Centro Cultural y
la Embajada de España, de la Fundación Mondriaan, BienalSur, PICE/Acción
Cultural, Instituto Etxepare y de la Generalitat de Catalunya.
En
este contexto, el embajador de España en Chile, Rafael Garranzo, sostuvo
que “existe una generación de artistas españoles contemporáneos que a
través de su obra trabajan y reflexionan sobre la memoria y sobre la
historia reciente española y para nosotros como Embajada y Centro Cultural nos
parecía importante entrar en ese diálogo con los artistas chilenos, sobre todo
en un contexto como el actual, en el que se conmemoran 50 años del golpe de
Estado en Chile y se cumplen también 30 años desde la apertura del Centro
Cultural de España en Chile”.
Lejos
de desplegar una cronología de ambas dictaduras, “Lo que nos queda por hablar”
revela nuevos relatos. En lugar de detenerse en recuerdos fijos del pasado,
busca operar como un espacio compuesto de fragmentos y narrativas inconclusas
que interpelan, resuenan y habilitan nuevas formas de imaginación relacionadas
a los silencios, huellas, cuerpos, monumentos y geografías de ambos periodos.
El delegado
para el Cono Sur de la Generalitat de Cataluña, Josep Vives, resaltó
el compromiso de Cataluña con el patrimonio memorial: “esta exposición
constituye una magnífica oportunidad para poner en valor la lucha de tantos
hombres y mujeres en favor de la causa de la democracia y de la
libertad y, al mismo tiempo, para recordarnos que esa lucha no ha
terminado porque siempre necesita de nuestro compromiso cívico inalienable”.
“Formamos
parte de una generación de restitución, clave para elaborar nuevas lecturas
contemporáneas de la historia, en este caso, desde el ámbito artístico y
cultural”, afirman las artistas del colectivo español Art al Quadrat, que
estarán presentes con un acto de homenaje a las mujeres que fueron rapadas como
forma de escarnio público durante la Guerra Civil y el periodo del
franquismo en España.
“Mi
expectativa es contribuir a la creación de comunidades de sentido, lugares
donde se pueda entender colectivamente la magnitud de estas historias y
sus implicancias en la actualidad”, explica por su parte el artista
chileno Mauricio Toro Goya, quien presentará la obra "Gólgota,
Caravana de la Muerte", sobre el paso de la comitiva del general Arellano
Stark por el norte de Chile.
La artista
catalana Noelia Pérez, en tanto, presentará una pieza compuesta de
fragmentos que datan de 1945, encontrados en un pueblo del interior de
Cataluña. A través de ellos, aborda la reconstrucción del recuerdo y la
función social del olvido en contexto de represión política.
“Me
interesa la memoria sentimental y sensorial labrada históricamente por las
clases populares pobres, la memoria sensitiva de los pueblos frente a la
historia oficial”, cuenta.
“Lo
que nos queda por hablar” abre la puerta a pensar la memoria como un proceso en
permanente construcción que reaparece bajo distintas formas y manifestaciones,
invitando a generar diálogos que revelen puntos de contacto más allá del lugar
de procedencia.
La
exposición se inaugura este 23 de noviembre a las 12.00h y estará
abierta al público de forma gratuita hasta el 7 de abril de 2024 en
el tercer piso del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos.
Artistas
de la exposición:
Alán
Carrasco (ESP); Alexis Díaz Belmar (CL); Amai Molinet + Eriz Moreno (ESP); Art
al Quadrat (ESP); Carolina Astullido (CL); Celeste Rojas Mugica (CL); Claudio
Correa (CL); Fernando Sánchez Castillo (ESP); Iratxe Jaio + Klaas van Gorkum
(ESP + NLD); Irene de Andrés (ESP); Lorenzo Sandoval (ESP); María Verónica San
Martín (CL); Manuel Correa (COL/ESP); Marco Godoy (ESP); Mauricio Toro-Goya
(CL); Noelia Pérez Sández (ESP); Nuria Güell (ESP); Oficina de Investigación
Documental (ESP); Paula Rubio Infante (ESP).